En el presente Post busco subrayar el cuidado que debemos tener con nuestros pies. Para ello utilizaré un mito griego de Edipo que lo tenemos muy presente porque Sigmund Freud se valió de él para apoyar parte integrante de su teoría psicoanalítica. Desde luego que no existe una relación directa entre el cuidado que debemos tener con los pies y este mito, pero sí pretendo con ello tener siempre presente que los pies –como cualquier otra parte del cuerpo- deben ser atendidos con esmero y cuidado.
Son varias las versiones que se han gestado sobre el mito de Edipo. Me voy a permitir describir algunas de ellas, entresacando lo más relevante de cada relato, lo que nos encausará hacia el objetivo de este Post, el cuidado de nuestros pies.
Layo al conocer el oráculo de que su hijo lo mataría y se casaría con su propia madre, le hizo saber a su esposa Yocasta que no tendrían hijos, pero Yocasta se las ingenió para engendrar uno y así nació el bebé, que inmediatamente Layo ordenó quitarle la vida. Sin embargo, la súplica de Yocasta hizo que Layo le permitiera a uno de sus empleados se lo llevara lejos y lo colgara de los pies, para no tener que matarlo, en uno de los árboles de las faldas del Monte Citerón, hasta que muriera. Otra versión cuenta de que a uno de sus esbirros, Layo le pidió que lo llevara al Monte Citerón y que le lacerara las plantas de los pies del bebé para que al sangrar atrajera a las bestias y lo devoraran, de tal manera que no fuera muerto a manos del enviado.
En todas las versiones del mito, el bebé fue abandonado en el Monte Citerón. En una de ellas –como ya mencioné- se narra que por órdenes de su padre Layo, se le perforan las plantas de sus dos pies como señal de que no debería caminar y por lo mismo debería morir devorado por los animales; en otra versión, al bebé se le colgó de sus dos extremidades inferiores, para morir deshidratado. Sin embargo, en todas ellas el bebé no perdió la vida pues fue rescatado y pudo sobrevivir para cumplir con el oráculo.
El Monte Citerón estaba surcado por cientos de senderos que de modo general formaban un inmenso laberinto. Se decía que quien entraba en alguno de sus senderos que llegaban a sus faldas y si adentraba en él, jamás podría salir. Dédalo se inspiró en este Monte inextricable para diseñar el Laberinto que le pidió el Rey Minos construir en la Isla de Creta.
Después de 2 días de habérsele abandonado al bebé en las faldas de aquel Monte, un pastor llevando sus ovejas a pastar en sus inmediaciones, observó a lo lejos algo que colgaba de un árbol, y así pudo desamarrar y descolgar aquella criatura bastante deshidratada y con los pies hinchados. Este hombre sabía que el Rey Polibio, no podía engendrar hijos y se lo llevó a su Palacio Real, el cual lo adoptó como hijo. Le nombró Edipo, que significa el de los pies hinchados.
Es muy conocida la siguiente parte de la historia que siguió cumpliendo con el oráculo.
Edipo, siendo adulto, recibe el oráculo en Delfos, el cual le especifica que mataría a su padre y tendría relaciones sexuales con su madre. Esta profecía lo altera emocionalmente y huye de su padre y madre adoptivos para evitar realizar esas premoniciones horrendas. A partir de esos augurios vaga y camina por mucho tiempo y por ciertas circunstancias, Edipo se encuentra con Layo, su padre biológico, y por una rencilla lo mata. Continúa caminando por algún tiempo, y siguiendo su destino, Edipo descubre el enigma de la Esfinge y lo premian por ello desposándolo con Yocasta, que era el premio que se ofrecía en Tebas por tal descubrimiento, nombrándolo además Rey de Tebas. Con Yocasta, su madre, tuvo 2 hijas y un hijo. Así, Edipo cumple con el oráculo también en esa parte.
Algún tiempo después, Edipo descubre que mató a su padre y que Yocasta era su madre. Como autocastigo se cercena sus ojos, quedando totalmente ciego y se dedica a caminar en esta parte de su vida, regresando al Monte Citerón, en el cual se adentra perdiéndose en sus senderos laberínticos. Después de esta incursión de Edipo en el Monte Citerón, nunca más se supo algo de él.
Un aspecto sobresaliente en cuanto al tema que nos ocupa, es que cuando Edipo recibe el oráculo en Delfos, que mataría a su padre y tendría relaciones sexuales con su madre, huye de su padre y madre adoptivos para evitar realizar esas premoniciones horrendas, vagando y caminando por muchos meses, que sus pies se le hincharon y laceraron.
Después de darse cuenta que su oráculo se había cumplido, Edipo se autocastigó sacándose los ojos, renunció a su cargo de Rey de Tebas y se retiró para siempre lanzándose a caminar por senderos infinitos, cumpliéndose así lo que WILHELM STEKEL califica de compulsión del nombre, y que bien pudo haber sido algún otro oráculo, que lo mantendría caminando durante la última etapa de su vida.
Es bastante trágica la vida de Edipo. No hay duda de ello. ¿Un castigo de los dioses?
El mito coloca a Edipo ciego y caminando al final de sus días. Pareciera que el mito nos comunica que el caminar fue parte de su liberación; pero, ¿por qué se extirpa a sí mismo, sus ojos?
¿Caminar en la oscuridad tendría algún significado? ¿Deambular sin ver y sin sentido será la respuesta a ello?
Citerón fue el Monte consagrado a Dionisos. El Dios Griego Dionisos representaba el placer, la alegría, el optimismo y la dicha de vivir; dotaba a los humanos de fuerzas y de felicidad.
Muy probablemente Edipo decide caminar por el resto de su vida por los infinitos senderos del Monte Citerón, para buscar durante esas caminatas la fuerza y la alegría que había perdido, tratando de encontrar el consuelo y el cobijo de Dionisos, y alejarse de la tristeza y la desdicha.
Si con este post logro atraer una mínima atención sobre el cuidado de nuestros pies, el objetivo lo habré logrado: ¿Edipo, Dionisos, pies, caminar?
Tengamos presente la imagen de Dionisos. Caminemos todos los días buscándolo, y una vez que lo hayamos localizado, no nos soltemos de su mano.
Siempre fue una persona que admiré, por diferentes motivos, que en otra ocasión los expondré.
El haberlo suspendido por no haber aceptado ir a pelear a Vietnam, provocó que interrumpiera su carrera; así como yo seguramente dejaron muchísimas otras personas de seguir viéndolo boxear y escuchando sus ideas en general, su forma de ser y de sentir.
Ahora, durante el mes de agosto de 2022, por sincronicidad vuelvo a encontrarme con él. Caso que expondré en la parte II o III de los posts que publicaré en el futuro sobre el tema de Sincronicidad.
Me enteré que ya había muerto en 2016 y que había sufrido el mal de Parkinson. Qué pena con un atleta como Muhammad Alí. Tri-campeón de pesos pesados. Yo creo que es el mejor boxeador de todos los tiempos.
Hasta ahí mi reencuentro. Me enteré que por mi celular podía ver sus peleas.
Las empecé a ver una a una y recordé dos o tres de las que ya había observado.
El presente Post trata sobre el trotar de Alí en el ring.
Es un trotar muy especial que lo realiza hacia atrás y hacia su lado izquierdo. Si fuera zurdo quizás lo realizaría en el sentido contrario (esto habría que investigar en el futuro).
Lo realiza saltando, danzando, jugueteando, como cualquier otro pugilista lo haría. Sin embargo, no todos lo hacen desde el 1er round hasta el último, como lo puede realizar Alí, alternándolo en diferentes rounds. De hecho no son muchos los boxeadores que combaten con esa táctica.
A veces todo un round se la pasa trotando, pero la generalidad de las veces es durante intervalos que únicamente tardan sólo 15-20 segundos.
Alí realiza ese estilo brincando siempre sobre sus dos extremidades inferiores, hacia su lado izquierdo y con ligeros pasos (pequeños y cortos) hacia atrás. Lo lleva a cabo dando vueltas alrededor de su contrincante, siempre girando alrededor de él, y a una distancia constante, que cualquiera podría decir que está definida por el alcance de sus puños. Y es cierto.
También realiza ese “trotar” hacia el lado derecho pero no es su forma natural y seguramente no logra los mismos resultados y se aprecia torpe e insubstancial. Recomiendo que se le observe más acuciosamente.
El subrayar que lo realiza hacia atrás podría oírse falso, porque perdería la distancia de alcance; sin embargo, si lo observamos detenidamente veremos que en cada pequeño paso hacia atrás –del tamaño marginal- el adversario avanza esa misma distancia, como si Alí conscientemente lo haya practicado y de manera intuitiva supiera que su contendiente lo seguirá en su trotamiento. Esto también recomiendo que se estudie acuciosamente.
Puntualizaré sobre este re-encuentro.
Existen 4 fechas importantes que debo señalar de lo que estuve pensando y planeando sobre el Blog, que tienen relación con este Post.
El 26 de septiembre de 2019 se me ocurrió desarrollar un Post sobre el caminar hacia atrás, lo que me permitió investigar los beneficios que podrían conseguirse con esa forma de caminar (Post Futuro CAMINANDO PARA ATRÁS). Esta práctica la lleva a cabo Alí con su trotar especial durante sus encuentros boxísticos. Seguramente que también la realizaba durante sus ensayos, simulacros y ejercicios que acostumbraba en el gimnasio.
El 20 de febrero de 2020 tuve la idea de escribir otro Post sobre la Kaaba, debido a que era una práctica de caminar milenaria donde se comunicaban con una divinidad dando vueltas alrededor de un centro divino (Post EL SISTEMA WALK-RWD Y EL CENTRO DE LA KAABA). Alí también realiza este tipo de vueltas alrededor de su contrincante, y algo más, su mirada se concentra en un solo punto (Muchos dirían que lo realiza así para golpear a su contrincante y mantenerse alerta de su atacante). Posts futuros EL YANTRA Y EL CAMINAR; y LOS MANDALA Y NUESTRO CAMINAR.
El 15 de junio de 2020 se me ocurre compaginar algunos ejercicios que estuve practicando en mi propia persona, además del caminar para atrás, que forzara mi cerebro, y pude experimentar entre 10-12 ejercicios de este tipo (Post futuro GIMNASIA CEREBRAL MIENTRAS CAMINAMOS-EJERCICIOS).
En este período obtuve buenas experiencias adicionales a las que siempre he tenido, pues pude forzar a mi mente a desplegar nuevos esfuerzos para mantenerme caminando en condiciones fuera de la normalidad. En un futuro próximo publicaré este Post. Se detallan 2 ejercicios que implica el trotar de Alí.
Finalmente, el 21 de septiembre de 2020, decido ampliar la investigación y el análisis de la práctica de dar vueltas a un punto central debido a que tiene más implicaciones, del tipo físico, mental y espiritual, y de mayor importancia (Post futuro EL CAMINAR Y LA CIRCUMAMBULACIÓN). Alí es un practicante de la circumambulación, al pelear en el ring con su manera de trotar hacia atrás y dando vueltas, alrededor de su contrincante. Se renueva física y espiritualmente. Y casi estoy seguro que su entrenador y manejador Angelo Dundee debería haberlo sabido (Sobre su propia circumambulación).
Todo esto me ha conducido a leer parte de lo que está escrito sobre su fuerza espiritual y su credo religioso.
Quisiera decir muy brevemente que no soy partidario de ninguna religión, tampoco me gusta la política; sólo creo en el arte y la ingeniería y la economía, que son mis “de-formaciones profesionales”.
Como se sabe Alí se convirtió al Islam en 1964 y seguramente ya traía en su genética esta práctica de la circumambulación (*); de ahí que con mayor fuerza consciente la llevó a cabo arriba en el ring.
Además de estas relaciones que he descrito, lo más relevante es que observo en todas las peleas de Alí, repito: en todas sus peleas, dos cosas: una, que cada vez que se siente agredido o acosado, recurre a ese caminar para mantenerse alejado de su oponente y cualquiera diría que es para escapar de ese acoso; y dos, también recurre a ese caminar cuando se siente cansado. Pareciera que ese caminar lo repone espiritualmente: el trotar hacia atrás, dando vueltas a un punto.
Seguramente existe la 3ª razón, por la cual recurre a esta táctica circumambulatoria: acabar por knock out a su contrincante; pero no lo puedo aseverar.
Describir este trotamiento no es fácil, hay que observarlo en la práctica arriba del ring. Someramente es: Caminar -Alí trota- lentamente hacia atrás y hacia el lado izquierdo. Circulando lentamente sin parar y manteniendo una distancia de un centro.
Siempre así.
Esto me ha inducido a analizar la distancia de toda circumambulación, debido a que seguramente tiene implicaciones del tipo físico y mental, pero sobre todo espiritual. Es decir, ese reforzamiento del espíritu de Alí a realizar esa práctica con una cierta distancia en su trotar alrededor de su contrincante, seguramente tenía una implicación determinante para tener una mayor fuerza, tanto física como espiritual.
Como podemos advertir, esta práctica no es natural en el caminar del ser humano; es una manera de forzar a nuestro cuerpo y mente para alcanzar otras formas energéticas para desarrollar mejor nuestras funciones y además generar que la mente disponga de otras áreas cerebrales que se han encontrado dormidas.
He decidido realizar una 2ª parte sobre este tema del Trotar de Muhammad Alí debido a que por los datos que he podido observar en mis investigaciones, es posible que pueda establecer y comprobar una correspondencia importante entre los siguientes parámetros (además de otros que iré advirtiendo): la edad de Alí, la fortaleza de Alí y sus contrincantes, el alcance de ambos adversarios, el o los rounds donde lo observamos llevando a cabo este trotamiento con el objeto de “recargarse” espiritual, anímica y físicamente, lo que a su vez me llevaría a demostrar fehacientemente mi tesis.
En esa segunda parte podré analizar si existe una correlación “alta” entre el número de veces que Alí utiliza esta táctica en una pelea y la mayor o menor dificultad que resiente ante su adversario.
El elemento fundamental que dará cauce a mis siguientes análisis y evaluaciones de los datos recabados, será ese “recargarse” espiritualmente de Alí.
Por lo pronto a continuación les presento algunas de las peleas donde Alí trota en algunos de los rounds, aunque repito: en todas sus peleas desde 1960 lo hace.
Como decía, el post trata sobre el trotar de Alí en el ring que muchos comentaristas le llaman BAILAR (DANCING), y esto me lleva a tomar más en cuenta mis apreciaciones sobre el baile, específicamente el bailar hacia atrás. Esta modulación en el baile lo podemos observar en muchos tipos de baile y yo mismo lo realizo en el baile de Tap Tap [Video donde se aprecia esta secuencia].
(*)¿Por qué caminar dando vueltas a un centro sagrado? Estas configuraciones que se generan alrededor de un Centro y que se disponen todas ellas concéntricamente de forma radial y simétrica, conforman la totalidad del mandala, los cuales deben ser motivo de un análisis profundo para las personas que los generan. Su función y conocimiento, en este caso de la KAABA, nos puede servir como una representación de estas imágenes inconscientes que durante las 7 vueltas que se realizan alrededor del Centro Sagrado tiene su interpretación dentro del islamismo como una meditación (búsqueda interior e indagación de la divinidad que todos tenemos dentro), una contemplación (percibir nuestras inclinaciones místicas para buscar el contacto con la divinidad, y así mismo, buscar la reconciliación de nuestras contradicciones en el sí mismo -como lo ha mencionado C. G. Jung-, y tener contacto con nuestros orígenes arcaicos) y una transformación (el mandala en sí es el símbolo que resulta de la práctica que durante milenios se realizaron acciones periódicas y habituales grabándose en el inconsciente y que hacen contacto con los arquetipos, para la transformación de la personalidad del individuo que los evoca).
Como algo inusual, mañana que salgamos a caminar demos unos pasos para atrás, con mucho cuidado para no caernos, y observemos todas nuestras reacciones y experiencias que tengamos. Para trotar como Alí es muy difícil, se requiere ser un atleta y gimnasta.
Son variadas las situaciones (escenarios, circunstancias, condiciones) en los que el ser humano busca una mascota, las cuales podemos dividir en los grandes apartados siguientes:
Búsqueda de compañía.
Necesidad psicológica.
Por discapacidad o movilidad reducida.
Para protección personal.
Por generosidad y compasión (por no llamarla lástima).
Por otras causas y motivos menos importantes.
Algunos de ellos se pueden observar combinados (mezclados) de alguna manera, es decir, que el sólo interés de buscar compañía, podría estar auspiciado por un factor psicológico, o a la inversa, y así el resto de escenarios.
Algunas de estas condiciones se generan porque el ser humano necesita transmitir sus sentimientos, impulsos y apetitos, en términos generales, y no tiene otro ser a quien trasladarlos.
El binomio pleno (crudo, frío) de esta relación “mascotariana” es dar y recibir.
Además del factor ejercicio, que prácticamente todas las mascotas nos lo generan, unas más y otras menos, existe una gran cantidad de beneficios y servicios que nos proporcionan, siendo muy diversos, mismos que relacionamos en el cuadro siguiente, de modo genérico. No obstante, estos beneficios que se pueden obtener de ciertas mascotas, no debemos confundir con otros servicios que nos prestan en un sentido comercial o mercantil o económico.
Los perros y los gatos son las mascotas ideales y perfectas pues viven dentro de nuestras casas, las cuidamos y alimentamos como si fueran miembros de la familia, y el cariño que sentimos por ellas es recíproco.
Esos beneficios y servicios que recibimos de nuestras mascotas depende mucho de las costumbres del grupo humano a que no refiramos, sin embargo, de forma general, en el cuadro siguiente presentamos los beneficios y servicios que disfrutamos de la gran diversidad de ellas.
Desde luego que en una sola mascota no podremos encontrar todos estos beneficios; sin embargo, esta larga lista nos orienta a pensar, el por qué podemos optar siempre en tener una mascota, según la necesidad que tengamos en cierta época de nuestras vidas.
Todas las funciones que se le adjudican a las mascotas son benévolas. Sin embargo el ejercicio físico es de las más importantes, al igual que la compañía y la catarsis.
EJERCICIO FÍSICO. EL CAMINAR CON LA MASCOTA.
No cuento con información suficiente sobre el resto de los animales, aparte de los perros y los gatos, para ilustrar al respecto. El porcentaje de la relación del ser humano con el perro y el gato, es muy elevado, y fundamentalmente sobre esa estadística nos concentraremos en este tema, y no por ello dejaremos de dar algunos datos sobre otras mascotas que han acompañado al hombre y a la mujer.
De ellos dos, el perro como mascota nos ha otorgado un beneficio invaluable como “ejercicio físico”, obligado o no, en diferentes etapas de la vida [varones, mujeres, anciano(a)s y niño(a)s] siendo un beneficio muy grande, y ese ejercicio es también casi del 100% en el caminar al lado de la mascota. Así mismo, se debe tener conciencia de que en un alto porcentaje el individuo no busca el ejercicio cuando adopta una mascota, sino otros beneficios, sin embargo lo obtiene sin buscarlo.
COMPAÑÍA
Otro de los beneficios que encontramos en las mascotas, que prácticamente está generalizado en todas ellas, es su compañía. El valor “Compañía” es uno de los factores que más importancia le dan los poseedores de mascotas. Este es una respuesta inmediata y regular en todas las mascotas, aunque varía de grado según el tipo, y que invariablemente resuelve varios problemas como la falta de comunicación (incomunicación), la soledad, el aislamiento auto-impuesto, el encierro, el retraimiento social, la separación de parejas, la orfandad, la melancolía, la tristeza, la nostalgia, etc.
Entresacando a la soledad como uno de los grandes problemas que aquejan a un alto porcentaje de la población de edad mayor, aunque también la encontramos en las grandes ciudades y en edades adultas, se le intenta resolver con la compañía de una mascota.
LA CATARSIS
La catarsis –en el sentido más amplio del vocablo- que se logra con las mascotas es muy efectiva. Estudios que se han desarrollado al respecto nos permiten asegurar que una gran variedad de malestares (padecimientos, perturbaciones, alteraciones, trastornos, desarreglos) psicológicos se mejoran al tener contacto con animales y mejor con las mascotas. Muchas personas que lo han experimentado comentan: “mi mascota me sirve como terapia”. Se puede entender esto, si observamos que “su” mascota le sirve de compañía, refuerza su seguridad, le da amor, y se siente útil. Claro que las mascotas eliminan –en parte- el hastío, la soledad, el fastidio, el tedio, el desánimo, el retraimiento psíquico, los monólogos, la melancolía, el desaliento, el pesimismo, la desesperación, la nostalgia, la tristeza, hasta podríamos decir, también ayudan en la depresión, la ansiedad y la angustia psíquicas (Post futuro CATARSIS MASCOTIANA Y EL SISTEMA WALK-RWD-PARTE II).
En este renglón, la lista de beneficios efectivos es bastante grande: atención, amor, cariño, caricias, afecto, apego, ternura, amistad, interés, simpatía, aprecio, mimos, arrumacos, cuidados físicos, etc. En una sola frase se busca y se logra: “la sustitución de la compañía humana”.
LA SOLEDAD.
Quisiera decir algunas palabras sobre el concepto de la soledad. Me refiero a esa soledad que es el resultado de vivir solo(a), de sentirse solo(a), percibirse solo(a), lamentarse se estar solo(a), arrepentirse de estar solo(a), porque se añora estar en compañía, de una manera desesperante y afligirse anímicamente por no estar acompañado(a). En los posts EL CAMINAR Y LA ELECCIÓN DE LA SOLEDAD. PARTE I y CAMINAR EN SOLEDAD, UNA ANALOGIA DE VIDA, hemos mencionado que la soledad se requiere y se busca voluntariamente, en ciertos momentos del día, para dialogar con uno mismo, para meditar, o estar simplemente en silencio durante un período de contemplación irreflexiva; sin embargo, ahora me estoy refiriendo a ese estado anímico de afligirse por sentirse solo, debido fundamentalmente por estar solo, un estado de soledad psíquica.
ASPECTOS PSICOLÓGICOS.
Este es un aspecto muy amplio y difícil de validar. Las mascotas pueden reemplazar al amigo o amiga, al esposo o la esposa, al hijo o hija, al sacerdote, al psicólogo, al maestro, al jefe,… Y desde el punto de observación psicológica, se busca inconscientemente no tener respuestas negativas, reclamos, negaciones, rechazos, oposiciones, obstinaciones, o bien, poder decir, cualquier cosa, un improperio, regaño, grito, insulto, insolencia, irreverencia, provocación, a sabiendas de que no habrá ninguna censura o protesta. Desde el enfoque psicológico de la dificultad que el ser humano tiene en su relación con seres de su propia especie, en la época contemporánea –y desde siempre-, la mascota puede resultar un mecanismo compensatorio ante ese tipo de problemas de comunicación. ¿Tendrá ello una relevante relación con la responsabilidad que sienten los dueños de mascotas? Es decir, se deshacen y descargan cualquier tipo de responsabilidad por tratarse de animales irracionales, como se les ha llamado.
Difícilmente se puede lograr un diálogo con cualquier mascota, aunque algunos dueños de cotorros afirmen lo contrario. Más difícil es poder lograr una confesión o una confidencia efectivas, pero lo intentamos.
Quizás el monólogo y el soliloquio puedan canalizarse de una mejor manera. Prácticamente el 100% de las personas [varones, mujeres, anciano(a)s y niño(a)s] que tienen una mascota platican con ella. También podemos decir que quién más platica con ella es el “dueño” y no el resto de los miembros familiares.
Las mascotas, en general, requieren mucha atención constante, sin embargo, estas también sirven para aquellos creadores que no se pueden concentrar en labores de creatividad. Aspecto que parecería contradictorio, pero no es así. Creo que se debería investigar con mayor profundidad este aspecto que ayudan en la concentración creativa. Quizás algo tenga que ver con el tipo de responsabilidad que se tiene con las mascotas.
Aunado a la carencia de responsabilidad, está el esgrimir el poder (con autoridad y jerarquía) que el ser humano, casi en su generalidad y según sus propios niveles de desequilibrio emocional, trata de ejercer e imponer sobre el resto de sus congéneres; las mascotas le sirven de mucha ayuda en esa canalización enfermiza (malsana), pues lo ejercen a sabiendas que no va a haber ninguna respuesta o represalia (hostilidad), y siempre será olvidado (?) inmediatamente por la mascota.
TRASMISIÓN DE AFECTOS Y AMOR
Es indudable que el contacto que tenemos con nuestras mascotas es una transmisión recíproca de amor, afecto, ternura, amistad, empatía, y que nos coloca en una situación sana de armonía con nosotros mismos por el apoyo emocional que recibimos de ellas. Buscamos recibir afecto e interés porque lo necesitamos, porque quizás no tengamos a nadie que nos lo transmita o sea insuficiente para nosotros. Buscamos dar afecto (amor, cariño, etc.) porque nos sobra ese sentimiento o no tenemos a nadie a quien transmitirlo. En una sola frase: dar y recibir.
CAMINANDO CON NUESTRO PERRO.
Es posible también que nuestro perro nos obligue todos los días a caminar, y ello nos procura un estado extra de salud, tanto física como emocional.
Para algunos, este es el mecanismo que utilizan para iniciar una caminata, 2 o 3 veces al día.
Antes de continuar este gran beneficio que obtenemos de caminar y así cubrir lo fundamental de esta primera parte del post, quisiera comentar ciertos aspectos respecto a los perros.
La relación con ellos es de recibir y darles cariño. Sentir compañía y hacérsela sentir a ellos.
Yo en lo personal, desde chico siempre tuve mascotas, una perra, híbrida (mestiza) de collie y alemán, y gatos, varios gatos –como 5-, de los 4 a los 10 años de edad. Una vez declarada esta verdadera inclinación que tuve y que sigo teniendo, hacia los gatos y los perros, quisiera comentar lo que pienso ahora sobre nuestro afecto (apego) como especie humana, hacia los perros.
El perro es de las mascotas que hemos “educado” desde siempre para que nos hagan compañía, y para ello hemos logrado restarles parte de sus instintos, con mayor intensidad [más brutalmente (intensamente)] que con otro tipo de mascotas. Su docilidad está correlacionada con su amaestramiento y entrenamiento. Mejor se portan y obedecen, menos instintos tendrán.
Así es que, si no molestan es porque les hemos destruido sus instintos.
Si los tenemos atrapados (encarcelados) en una habitación, sus órganos y demás funciones se atrofiarán; de igual manera que le sucede al ser humano.
Así es que, si tenemos un perro, saquémoslo a pasear, caminemos todos los días al lado de ellos.
Ya he mencionado algo sobre los aspectos de la falta de tiempo y el tiempo libre (Posts EL CAMINAR Y LA FALTA DE TIEMPO PARTE I y EL CAMINAR Y EL TIEMPO LIBRE. PARTE II) y he expresado lo siguiente: “Es importante señalar el aspecto de que algunas personas sienten que están perdiendo el tiempo al caminar; que no reciben nada a cambio. En esos casos habrá que indicarles –a esas personas- que si se tiene esa sensación deben pensar que lo están aprovechando en la lectura de aquel texto o documento que no habían tenido oportunidad (o deseos) para hacerlo, o de escribir aquel poema, (¿y pasear a la mascota, es un tiempo perdido o disfrutado plenamente?”.
Si usted tiene un jardín privado donde podrá siempre disponer de él para colocar a su mascota para que se ejercite –jugando, caminando o corriendo-, haga caso omiso de ello; utilice ese espacio para que pueda su mascota realizar sus necesidades. Lo mejor para su mascota es que usted la saque a caminar y la acompañe en sus juegos y travesuras, y no necesatriamente dentro de ese jardín.
Sobra decir que con ello usted también saldrá favorecido, pues podrá CAMINAR, 2 o 3 veces al día.
Compartiré con ustedes unas estadísticas que pueden hacernos tomar conciencia de lo que sucede respecto a la relación del ser humano (hombres, mujeres, niñas y niños, ancianos y ancianas) con perros (exclusivamente) y su salida diaria para ejercitar a la mascota.
Poner una correa a su perro, es lo más aconsejable, porque aunque la mascota propia podría estar bien entrenada y educada, no podemos asegurar nada respecto a las de otras personas, y con la correa podrá al menos controlar a su propio perro.
Ciertamente cabe la posibilidad de poder leer ciertos tipos de documentos mientras caminamos con nuestro perro, el amigo eterno.
El caminar es un ejercicio que nos permite tener libertad en los brazos y manos, por lo que con una mano podría mantener sujeto con la correa a su perro, y con la otra podría dar lectura a cualquier documento, ya sea un libro o a través de un Mobile o Tablet. Inclusive podría sujetar la correa a su cinturón, para tener las 2 manos libres, y podría de esa manera, hasta escribir.
Hay que tomar muy en cuenta el tipo de mascota que tenemos para así organizar nuestras caminatas, eligiendo el lugar, el horario, etc.
Las mascotas también se cansan de caminar, trotar o correr, como “Cindy” que mostramos en seguida, que se encuentra algo agotada.
Por lo general la sacan a caminar y a jugar con sus otros pares, pero a ella le gusta pastar (pacer), es decir, comer pasto.
No todas las mascotas tienen el beneficio de obligar a su dueño a caminar todos los días. Por ejemplo, no es lo mismo sacar a pasear a un gallo
que a un elefante, o a un venado, o a una víbora.
Por cierto, esta Crotalus Dirissus Terrificus es la especie que utilizaron los antiguos mayas para representarla como uno de sus principales símbolos, que lo podemos apreciar en sus estandartes, ropajes, edificios, tapetes, esteras, murales, en casi todos sus legados culturales, que han podido llegar a nosotros. La misma que vemos en la actualidad descender de la pirámide de Kukulkan dos veces al año, el tiempo dedicado al Dios Topilzin-Ce-Ácatl que tomó el nombre de Kukulkan (Quetzalcóatl) cuando dirigió a los toltecas que invadieron por mar a los mayas, en el siglo X. Un descenso espectacular que se observa en los equinoccios de primavera y de verano, en esta pirámide en Chichén Itzá, México.
Tiempo atrás tuvimos en casa una perrita Papillón, y posteriormente a una maltés cruzada.
Imposible sacar a “caminar” a un pez, tampoco a un águila o a un búho, ni a un león o a un tigre de bengala.
No obstante lo anterior, deberemos también tomar conciencia, si decidimos adoptar un perro –para apoyar nuestras caminatas- sobre el cuidado y responsabilidades a que estaremos obligados con él, y no pensar que podremos delegar esos compromisos en otras personas, porque entonces pondremos a caminar –lejos de nosotros- a ese par de compañeros -nuestra personalidad y carácter– que siempre tratan de acompañarnos, y entonces lo harán por otro sendero, distinto al nuestro, alejados de nosotros, amén que lo harán a velocidades totalmente diferentes, por lo que los perderemos en lontananza (Post EL CAMINAR Y EL INSTINTO DE SALIR DEL LUGAR DE ORIGEN; Post futuro LA PERSONALIDAD DEFINIDA POR EL RITMO AL CAMINAR-CUERPO).
Cuando decidamos salir a pasear con nuestro perro y gato, hagámoslo pero caminando, y los 3 erguidos.
Cuando los gatos y los perros tuvieron conciencia de que el ser humano empezó a tener mayores índices de inteligencia a partir de que se irguió sobre sus 2 piernas y pies, decidieron ellos también pararse sobre sus 2 extremidades inferiores.
Ahora bien, lo que sí es verídico es que “Como ejemplo de la pervivencia en nuestra naturaleza humana, de esa necesidad totémica espiritual, el perro y el gato son esos animales que intentamos o deseamos imitar, por ello los hemos retenido como mascotas. El perro, quizás el más fácil de domesticar, o quizás lo permitió porque él mismo necesitaba de ese intercambio almático y optó por convivir con el ser humano; fiel e inseparable de su amo. Hemos necesitado de su presencia ‘totémica’ ya que deseamos imitarlo por su imperecedera e imperiosa necesidad de estar en movimiento, circulando, pero sobre todo vagando, como un instinto todavía firme en él” (Texto extraído del Post TÓTEM Y CAMINAR. PARTE I. ASPECTOS ANTROPOLÓGICOS).
El gato doméstico, todavía con su instinto semi-salvaje que aún persiste en su naturaleza esencial felina, de ser libre y del no dejarse encerrar ni domesticar; su atributo “totémico” es observado inconscientemente por su dueño, para imitarlo en su deambular libre (Post EL CAMINAR Y EL INSTINTO DE SALIR DEL LUGAR DE ORIGEN).
Ambas mascotas son el fiel reflejo de nuestro perdido nomadismo ancestral.
Finalmente quisiera subrayar que las mascotas se utilizan inconscientemente para expresar formas de ser propias, que nosotros los humano o nos atrevemos a decir, desde el afecto y amor que sentimos hasta nuestras aversiones al resto de los entes y cosas que nos circundan, que nos dan alegría, placer, enojo, animadversión, pero que no podemos o no nos atrevemos a decirlo directa y abiertamente. Una verdadera “catarsis mascotiana”. Pero de esto nos ocuparemos en la segunda parte, dentro de unos meses (Post futuro CATARSIS MASCOTIANA Y EL SISTEMA WALK-RWD-PARTE II).
P.D. Ahora en esta época del COVID19 no puedo reconocer a mis vecinos por traer todos ellos tapabocas, lo que me ayuda es que puedo identificarlos por sus mascotas, pero algunas veces no las sacan a caminar.
Ahora bien, quisiera dirigir algunas palabras para referirme a ciertos aspectos psicológicos del ser humano en referencia a su inclinación que manifiesta hacia los animales. Es decir, siempre ha existido una parte de la población humana que se ha inclinado a la protección de los animales en general, y otra parte de la misma, que no manifiesta ninguna inclinación hacia su cuidado, y podríamos decir que hasta suele ser cruel.
En mi novela DIOS VA AL PSIQUIATRA el Doctor Madera –el segundo personaje en importancia- cuando estaba seleccionando su especialidad en la Facultad de Psicología argumentaba que quería aspirar al doctorado con el firme propósito de saber a ciencia cierta cuáles eran las causas de estos dos mundos en el ser humano. Cito algunos párrafos de esta novela:
“Al cabo de algún tiempo, y estando por terminar su licenciatura, Ernesto tuvo la oportunidad de ingresar al Instituto de Psicología en el área de Investigaciones sobre el maltrato hacia los animales, como ayudante de investigador.
Durante cinco años más estuvo estudiando en la División de Estudios Superiores de la misma Facultad en dicha Universidad, lo que lo mantuvo alejado de su familia. Al terminar su doctorado en Psicología, en breve tiempo le dieron la categoría de investigador titular en el área mencionada del Instituto, y, por la claridad que mostró en sus objetivos, pronto fue nombrado Jefe de Proyecto.
Las tres líneas de investigación que Ernesto se había planteado realizar, desde que conformó su tesis de licenciatura, estaban señaladas en su disertación doctoral e integrarían su nuevo programa de investigación.
Además de investigar acuciosamente el por qué de las diferencias entre los seres humanos respecto a su inclinación o rechazo hacia los animales, cuando éstos no le son agresivos ni perjudiciales o ponzoñosos, por encima de las actitudes traumatizantes o de temor, enseñadas y aprendidas en la infancia, profundizaría en averiguar el por qué algunos si las introyectan y otros no.
Paralelamente, y como segunda vía de análisis y de corroboración, investigaría si era un caso de genética, o sea, tenía que ver con los genes por los cuales se heredaba el amor hacia los animales y la necesidad de convivir con ellos durante la infancia, ya que los instintos no estaban reprimidos o lacerados todavía; y dentro de esta línea, constatar si pesaba más la cultura y el medio familiar. Además, si por la educación o por la genética, la inclinación o repudio hacia los animales estaba también determinada por la diferencia de género.
Por último, y como tercera vía de su investigación psicológica, estudiaría si los niños que requieren y aman a sus mascotas están igual de sanos anímicamente que aquéllos a quienes no les interesan o no las necesitan; ya sea porque las ignoran o rechazan.
Lo anterior lo llevaría a poder dilucidar si esos pequeños que las aman como compañía, ya manifiestan algún sentimiento de vacío o soledad que los inclina a aceptar a los animales y protegerlos; es decir, si esos niños, ya padecen alguna predisposición o debilidad anímica que los hace requerir esa presencia, que posteriormente puede convertirse en dependencia. Habría que discernir también si niños con ausencia de amor, o maltratados, menguados en sus instintos, requieren o no a los animales; y si ¿los protegen?, ¿o los maltratan?”
¿Será posible encontrar una respuesta a esta diferenciación?
Mientras meditemos sobre esta gran disyuntiva humana, tomemos a nuestra mascota canina e invitémosla a pasear.
En el Post COMBATIENDO LOS MALOS HÁBITOS CON EL WALK-RWD, SOLUCIÓN A LA PROCRASTINACIÓN, presentamos un proceso de 3 fases para combatir casos de procrastinación y un caso concreto que sirve de modelo general para resolver prácticamente todas las situaciones de procrastinación que se generen como un hábito. El Sistema WALK-RWD nos facilita atender esa Necesidad Interior que genera el hábito de procrastinar, lo que a su vez permite romper con el Círculo Vicioso de los Hábitos Negativos, y concretamente el psico-dependiente de la Procrastinación.
Ya hemos señalado que la procrastinacón no es simplemente posponer una acción o actividad para el día siguiente, sino posponerla con dolor. Es decir, que si un compromiso con alguien o con nosotros mismos lo postergamos para otra ocasión y no nos causa ningún dolor, es porque sabemos que lo estamos aplazando de manera natural y que después lo llevaremos a efecto. La procrastinación es posponer las cosas a costo de un dolor porque no podemos emocionalmente hacerlas, aunque sabemos y queremos llevarlas a cabo. Ese dolor es emocional.
También hemos señalado que en esencia, la procrastinación no es una cuestión de ineficiencia, improductividad ni de rendimientos. En otras palabras, para solucionarla no es necesario aplicar algún programa o proyecto de gestión y administración de tiempos, o de aplicación de nuevas estrategias de control o supervisión de actividades productivas. El fondo y la esencia del problema de la procrastinación es el control y manejo adecuado de nuestras emociones.
En esencia, la procrastinación es un dolor emocional por no realizar las cosas que debemos hacer.
Así mismo hemos señalado, que la procrastinación tiene relación con los malos hábitos (hábitos negativos) y con las adicciones, y fundamentalmente con las actividades que no hacemos porque las posponemos indefinidamente debido a que nos representa muchísimo esfuerzo realizarlas.
No voy a repetir lo que en los anteriores posts he mencionado sobre este tema, sin embargo, específicamente subrayaré que es fundamental tener en mente que independientemente en qué área la coloquemos para su atención, invariablemente deberemos canalizar esfuerzos considerables para identificar la o las emociones nocivas (perjudiciales) que están influyendo negativamente al individuo para que posponga sus actividades.
Rápidamente, quisiera consignar las definiciones que dan sobre este vocablo para tener una claridad completa sobre este problema emocional.
Procrastinación, del latín procrastinare, que proviene de pro, adelante (del gr. pro: delante, antes, en lugar de, anterioridad o primacía en el espacio o en el tiempo), y crastinus, referente al tiempo a futuro, de cras: mañana). Es la postergación o posposición de una acción o actividad; es el hábito de retrasar la realización de actividades o circunstancias que se deberían atender en cierto lugar y en cierto momento, y que se difieren mediante el reemplazo de pretextos o dilaciones; es dejar de realizar una actividad para realizarla en otro momento o bajo circunstancias diferentes.
Procrastinación: Acción y resultado de retrasar o aplazar la realización de una actividad, acción o cosa.
Procrastinar: Dejar de realizar una actividad posponiéndola para más tarde u otro día, semana, mes o año.
Como ya hemos mencionado la procrastinación puede ser un síntoma de malos hábitos o de emociones negativas. En este post propondremos soluciones concretas a la procrastinación utilizando el sistema WALK-RWD para eliminar la procrastinación generada por emociones negativas.
Ya hemos comentado (Post LAS EMOCIONES Y EL SISTEMA WALK-RWD) que las emociones son reacciones del cuerpo, físico y mental, a estímulos procedentes del medio exterior que perturban su equilibrio, pudiendo ser agradables o desagradables. Sin excepción, cuando se manifiestan, repercuten en todas las partes del ser, en mayor o menor medida; pero algo muy significativo (importante) de ellas es que pueden transformarse en la causa de diversas enfermedades.
Las emociones se generan por un flujo de fuerza del tipo nervioso, fuera de lo normal. La estabilidad anímica del ser es rebasada por ese flujo desbordado.
Tanto las partes físicas como las mentales del organismo se perturban (alteran) y todo él empieza a tratar de restablecer su equilibrio nervioso perdido. Hasta aquí, lo mencionado se aplica a las emociones en general, a las de cualquier tipo; pero, como decíamos antes, las emociones pueden ser agradables, con el calificativo de positivas, y desagradables o negativas.
Las emociones desagradables o negativas, son: la tristeza, el aburrimiento, el pesimismo, la nostalgia, lo celos, el odio, la ira, miedo, terror, culpa, hastío, desilusión, desesperanza, decepción, desesperación, melancolía, pena, aflicción, abatimiento, desaliento, desánimo, apatía, añoranza, soledad, fastidio, disgusto, enojo, tedio, irritación, repugnancia, aversión, asco, hartura, desgano, indiferencia, indolencia, aborrecimiento, hostigamiento, enfadamiento, enojarse, encolerizarse, impaciencia, exasperación, indignación, ofensa, desagrado, frustración, angustia, etc.
Cualquiera de ellas puede ser el origen de una procrastinación.
Las distintas acepciones del vocablo –denominando a la procrastinación de distintos nombres- nos definen sobre lo que tendremos que afrontar, por lo que me voy a permitir profundizar un poco en los aspectos psicológicos que provocan en el ser humano este comportamiento, que se le llama de diferentes modos: desinterés, dejadez, desidia, indolencia, pereza, desánimo, inactividad, tedio, molicie, indiferencia, desaliento, negligencia, irresponsabilidad, holgazanería, apatía, desgano, abulia, desaliento, indecisión, pusilanimidad, cansancio, ociosidad, molicie, somnolencia, ocio, pereza, fastidio, incapacidad, postración, decaimiento, depresión, agobio, desesperanza, neurosis, tristeza, etc.; todas estas manifestaciones –con orígenes emocionales- conducen a la persona respectiva a la procrastinación. Desafortunadamente, todas estas formas, en mayor o menor grado, recaen en una procrastinación; pero no tenemos en la mayoría de los casos que luchar contra todas ellas, quizás una o dos. Algunas de ellas son actitudes de posposición o de retrasar que tienen una causa patológica, también obsesiva, de ansiedad o por alteración emocional.
Ya hemos mencionado algunas formas que se utilizan para señalar y designar a la procrastinación: “Son estados de ánimo pasajeros”; “Son estados emocionales negativos que coartan las actitudes positivas”; “La procrastinación es la suma de estados de ánimos de inseguridad, flojera, incapacidad, frustración y aburrimiento”; “La procrastinación es un estado de depresión y de ansieadad”; “Procrastinar es sinónimo de aversión a realizar una tarea”; “La procrastinación es el resultado del estrés”.
No obstante esta multitud de variantes en el comportamiento humano, que son verdades insoslayables, todas recaen en un problema emocional.
Partamos de que el individuo que procrastina debe conducirse hacia un mejor manejo de las emociones negativas. Y como hemos señalado en varias ocasiones, el problema mayúsculo que se presenta en el fenómeno de la Procrastinación es identificar la causa emocional por la cual se tiene la actitud de posponer todas las actividades, todo el tiempo, lo más que se pueda. Pero una vez identificada esa causalidad, la aplicación del procedimiento que hemos señalado, resulta más cómodo y efectivo (Post AUTOLIBERACIÓN DE LAS EMOCIONES NEGATIVAS MEDIANTE LA SUGESTIONABILIDAD PROPIA).
Ahora bien, la procrastinación es un síntoma claro de un desarreglo emocional, no es el desarreglo en sí, sino la manifestación de que algo no nos funciona bien y que nos hace sentir mal, por ello respondemos de ese modo, es decir, no haciendo nada.
Debemos trabajar intensamente para localizar esa necesidad insatisfecha o ese malestar que traemos dentro.
Cuando se procrastina eventualmente, debemos comprender que la condición humana puede, como una respuesta saludable o normal, postergar la atención de cualquier actividad un tiempo perentorio, sin que por ello se califique de anormal. Sin embargo, cuando lo hacemos de manera repetida (manifestación crónica) significa probablemente la presencia de un síntoma de algún trastorno emocional o psicológico.
Independientemente de la emoción negativa que se manifieste es posible que el desarreglo psicológico sea de personalidad, depresión, inseguridad en sí mismo, trauma, pérdida de un ser querido, conductas irracionales, psicopatías irracionales, psicosis, angustia, neurosis, pánico y fobias, miedo al fracaso, ansiedad, sensaciones catastrofistas, estrés, miedo al ridículo, etc.
A continuación exponemos el método de autoliberación emocional mediante la autosugestionabilidad.
PASO 1. DETERMINACIÓN DE LA EMOCIÓN NEGATIVA.
Tengamos presente que el conocimiento de la emoción es el elemento psicológico que nos permite en sí iniciar la propia liberación.
PASO 2.-CONSTRUCCIÓN DE FRASES LIBERADORAS.
La construcción de una frase positiva es el recurso verbal racional más poderoso del método.
PASO 3.-CAMINAR. APLICACIÓN DEL SISTEMA WALK-RWD.
Caminar es el mecanismo estructural más efectivo y directo para hacerle llegar al inconsciente el mensaje verbal para el logro del autocontrol y liberarnos de la emoción negativa.
PASO 4.-PARTICIPACIÓN DEL INCONSCIENTE.
El inconsciente es el agente para realizar la sublimación sanadora.
Con este proceso dispongámonos a trabajar en nuestra propia procrastinación, y observemos que el método funciona efectivamente; teniendo siempre en mente que el caminar es un recurso que el genio de la lámpara, nuestro inconsciente individual, utiliza como “la obediencia (la atención) en el cumplimiento de un deseo” para eliminar todos nuestros males (Post futuro NO HAY NADA QUE UNA BUENA CAMINATA NO CORRIJA).
A algunos ejercicios les he asignado un nuevo número de identificación ya que cuentan con ligeras modificaciones, y a otros les he dejado el mismo número, precisamente para relacionarlos con los otros 2 posts mencionados. La presente combinación que he dispuesto en esta serie de ejercicios es muy apropiada para las partes corporales que intentamos fortalecer antes de iniciar una caminata.
Al igual que en los anteriores, es importante que realicemos varias series de estos, pues un aspecto que se genera con la realización de ejercicios –cualesquiera que sean- es la repetición constante de ellos, que nos conduce a crear un hábito, lo cual es positivo; sin embargo, habremos de estar atentos si se empieza a percibir alguna monotonía, para irlos alternando.
Estos y todos los ejercicios que recomendamos deben basarse en el principio fundamental de que se realicen de modo armonioso respecto al eje vertical o alternando los 2 miembros simétricos respectivos (Post LA SIMETRIA DEL CUERPO, SU EQUILIBRIO Y SU CAMINAR).
La caminata es un ejercicio natural en el ser humano, por lo que no se requiere un precalentamiento; sin embargo, se recomiendan, para realizar cualquier tipo de caminata, los ejercicios siguientes, aunque no son indispensables.
Se pueden realizar de acuerdo a las necesidades de cada persona y del estado físico en que se encuentre. Uno sólo, dos de ellos o varios.
Debemos considerar que cada persona puede realizar algunas modificaciones propias a los ejercicios, según sus necesidades, su comodidad y su singular forma de adaptarse a ellos, en cuanto a la duración, al estilo y secuencia; sin embargo, en términos genéricos, deben realizarse lo más apegado a lo que se especifica, detalla y explica. Cada individuo posee características propias que lo orientan a realizar los ejercicios de modo muy personal, por lo que resulta difícil que todos los realicen de igual manera y es prácticamente imposible llevarlos a la práctica de modo exacto e idéntico.
Para mantener una espalda fuerte y sana, al igual que la cintura, la cadera y las piernas, se recomiendan los siguientes ejercicios: