CAMINAR: SINTIENDO Y DISFRUTANDO.

Me he preguntado cuáles son las distintas formas que puedo utilizar para transmitir las bondades de este sistema. El propósito fundamental por lo cual publiqué este blog fue motivar a la gente para que camine y lleve a la práctica el Sistema WALK-RWD y de esta manera pueda experimentar las experiencias y vivencias que he tenido a lo largo de muchos años.

Es un verdadero reto porque escucho lo difícil que les resulta a las personas que conozco decidir hacer cualquier tipo de ejercicio. A mí en lo personal, algunas veces me resulta algo difícil; no obstante, venzo esa apatía, desgano y pereza, con sólo repetirme varias veces que siempre me siento extraordinariamente bien, durante y después de haber caminado, permitiéndole a mi cuerpo, mente y espíritu, realizar esta actividad que me agrada y me otorga niveles de satisfacción en un breve lapso, subrayo: breve lapso. Seguramente los mecanismos y formas de motivación son distintos para aquellas personas que vivan en lugares con altos grados de concentración urbana frente a aquellas que vivan en lugares menos complejos, además de otras circunstancias que también generan divergencias en sus estimulaciones y desganos. El desánimo se combate siempre con las mismas formas, pero con distinta intensidad, dependiendo de las circunstancias, los casos personales y de nuestra propia forma de ser.

Un elemento muy importante que debemos siempre tener en mente, como parte de la estructura funcional del Sistema WALK-RWD, es que no estamos compitiendo en ninguna de las 4 actividades fundamentales que conforman de modo integral, ni contra ninguna persona (ningún individuo), ni siquiera contra el “señor tiempo” (Post EL CAMINAR Y LA FALTA DE TIEMPO)

386. EL INSOBORNABLE “SEÑOR TIEMPO”

El título contiene los vocablos “sintiendo” y “disfrutando”. No existe duda para la mayoría lo que significa el disfrutar alguna actividad, aunque a veces no nos percatamos de ello; sin embargo, el sentir sí que a veces no lo comprendemos verdaderamente.

Basta decir que para disfrutar algo, se requiere sentirlo, ya sea consciente o inconscientemente.

Observemos cómo debemos sentir alguna experiencia, ejercicio, acción, actividad, etc.

Comencemos a comprenderlo observando sus contrarios.

La aversión, repulsión, negatividad, hostilidad, animadversión, menosprecio, repugnancia, etc., es lo contrario; si no nos encontramos en estas diversas posiciones, entonces muy probablemente podamos sentir simpatía, atracción, afecto, aprecio.

Está demostrado que un porcentaje elevadísimo de la población sufre desgano, apatía, pereza, a veces depresión (en diferentes niveles), cuando sabe que va a competir. Nuestro sistema busca liberarnos de esa camisa de fuerza, cadenas emocional-paralizadoras. Uno de sus lemas es “no competir”; con el único que tenemos que rivalizar es con nosotros mismos que debe entenderse exclusivamente como el desarrollar habilidades, gustos, apetencias, pericias, destrezas, facultades, pero como ya expusimos en otro post las distintas formas “sanas” que podemos utilizar para ello, (Post JUGAR Y CAMINAR-PARTE I. NO A LA COMPETENCIA, SÍ A LA DIVERSIÓN), baste saber por ahora, que únicamente habrá de lograrse una conexión con nuestro sentir, mediante los siguientes aspectos:

1) El querernos a nosotros mismos, atendiendo a nuestro cuerpo y a nuestra mente;

2) Buscar la salud;

3) Desear ser estables emocionalmente;

4) Experimentar y aprovechar el aquí y el ahora;

5) Ser empáticos con los demás y lograr tener paciencia con nosotros mismos;

6) Estar conscientes del tiempo de que disponemos;

7) Conocer verdaderamente la atracción que sentimos hacia el caminar, el leer, el escribir y el dibujar;

8) El atractivo o rechazo que sentimos sobre las actividades y compromisos que estamos obligados a desarrollar;

9) Ser conscientes de nuestras capacidades de concentración y meditación.

El impulso que debe movernos es ser mejores en todos los aspectos, cada día que pasa. No debemos contraer ningún reto para mejorar, si implica algún castigo por no llevarlo a su fin, por lo mismo no debe implicar altos costos, únicamente premios al esfuerzo, por haber “vencido” en silencio –sin que nadie se entere- a nosotros mismos para avanzar en nuestros propósitos y deseos.

Varios de los incisos que mencionamos atrás, están íntimamente relacionados sobre la concienciación que debemos tener cuando desarrollamos una actividad –cualquiera de las 4 del Sistema-, pues debemos llevarla a cabo por disfrutarla en sí misma y no por algún beneficio distinto , colateral, ni por una satisfacción en el futuro postrero (Post EL AQUÍ Y EL AHORA CON EL SISTEMA). Estas recomendaciones deben observarse para cualquier tipo de actividad, de modo general; es esencial su acatamiento si deseamos lograr un (el) apasionamiento en lo que realicemos (Post BUSCANDO LA PASIÓN EN LA REALIZACIÓN DE LAS COSAS, MIENTRAS CAMINAMOS).

¿Cómo podemos saber sobre la atracción –o rechazo- que sentimos hacia el caminar, el leer, el escribir y el dibujar, o hacia cualquier otra actividad? En este cuestionamiento habremos de considerar todas las acciones o actividades que realizamos, sean por gusto (decisión propia), por condicionamiento inconsciente o por compromisos laborales, familiares, sociales, cívicos, religiosos, etc.

En estos aspectos juega un papel importante nuestras capacidades de concentración, abstracción y meditación (ya comentados en posts anteriores), sin embargo, nos avocaremos esencialmente a la función (acto) de sentir y al arte (ejercicio) de disfrutar, de un modo simple y llano, de tal forma que todos podamos responder de manera sencilla y natural.

EL SENTIR

El ser y sentir siempre van de la mano. Nos sentimos bien cuando sentimos que nuestro ser se conduce libremente: nuestra mente se siente libre, nuestro cuerpo avanza tranquilamente, nuestro espíritu vuela en el aire. Nos sentimos mejor todavía cuando además nos estamos obsequiando a nosotros mismos cualquier cosa: un momento de paz, de meditación, de contemplación, de relajamiento.

EL DISFRUTAR

Con relación al disfrutar no pretendemos desentrañar cuestiones filosóficas sobre el hedonismo, la sensualidad, el erotismo o el placer; simplemente deseamos trasmitir algunas ideas del cómo poder gozar (deleitarnos) verdaderamente lo que realizamos.

Lo fundamental que habremos de tener en el sentir –no nada más tenerlo en la mente- es que el jugar y las otras 4 actividades integradas en el sistema WALK-RWD son acciones que contienen su fin en sí mismas, y que además, cada una de ellas es co-propulsada por el resto.

Cada actividad estructurada dentro del sistema está conformada por varias acciones. El saber y tomar conciencia que cada acción generada por nuestra inclinación a desarrollar estas actividades, tiene su fin en sí misma, nos coloca en una posición de equilibrio e independencia, para poder lograr un disfrute sin condicionamientos de ningún tipo.

Esta norma se aplica a todas las áreas del comportamiento humano: arte, negocios, gobierno, ejercicios, educación, inclusive dentro del mismo tiempo libre o el analfabetismo, etc., hay que instruirse y perfeccionarse, pero dejando de lado las cosas y formas que están determinadas por la estructura social (trabajo, religión, descanso, etc.) y hay que seleccionar nuestras actividades por lo que ellas representan por sí mismas, para nosotros. Sólo de esta manera podremos disfrutarlas.

La conducta humana deberá así estar dirigida hacia esas actividades y acciones por el valor en sí mismas que tienen para cada uno de los seres humanos.

Ahora bien, si ya sabemos que cada acción deberemos disfrutar por sí misma, ¿Cómo podemos lograrlo?

Antes que nada, podemos recurrir a la característica autotélica que ciertas actividades tienen para una persona específica.

Esta característica autotélica determina a las actividades como absorbentes y apasionantes, por lo que un individuo se interesa por ellas de modo desmedido y así logra enfrascarse por el valor que le representa ella misma, exclusivamente, lo que le permite ensimismarse y disfrutarla de modo abstrayente (extasiado).

El término “autotélico” proviene de la palabra griega “auto” (uno mismo) y “telos” (fin o propósito). Una actividad autotélica es aquella que se realiza por sí misma, es intrínsecamente gratificante y no se realiza con el objetivo de alcanzar un resultado o meta externa.

En los juegos que proponemos mientras caminamos, leemos, escribimos o dibujamos (post 122-JUGAR Y CAMINAR-PARTE I y II. NO A LA COMPETENCIA, SÍ A LA DIVERSIÓN) que son creativos, sencillos y divertidos, no contienen ningún enlace con la obtención o realización de algo productivo, sin embargo, sí tiene algo beneficioso para el que realiza la acción o la actividad al seguir sus instintos lúdicos.

También debemos recurrir a la característica heterotélica que todo ser humano tiene en su interior. Una actividad “heterotélica” se realiza con el propósito de alcanzar un objetivo o resultado específico.

En la ejecución del arte plástico y en otros géneros artísticos, esta característica impulsa al individuo (mujer u hombre) a actuar consciente o inconscientemente, moviéndolo hacia el desarrollo de actividades que tienen en sí mismas, un objetivo específico o valor productivo, con carácter estético, lo que les produce un atractivo en sí mismas.

A continuación presento varias actividades autotélicas y heterotélicas que podemos desarrollar, mientras caminemos.

Actividades Autotélicas:

Observar la naturaleza. Mientras caminas, disfruta de la belleza del entorno natural y aprecia los paisajes, árboles, flores y animales que encuentres.

Escuchar música. Lleva contigo tu música favorita y escúchala mientras caminas, disfrutando del ritmo y las melodías que te hacen sentir bien.

Practicar la meditación caminando. Concéntrate en cada paso que das, siente tu respiración y el contacto con el suelo, manteniendo una mente tranquila y en paz.

Tomar fotografías. Lleva una cámara o usa tu celular para capturar momentos interesantes o hermosas vistas, disfrutando tu caminata.

Conversar contigo mismo. Utiliza la caminata como un momento de reflexión y autoconocimiento, hablando contigo mismo sobre tus pensamientos y emociones, o sobre algún tema especial.

Dibujar al aire libre. Si eres aficionado al arte, lleva contigo tu material de dibujo y crea bocetos o cuadros inspirados en tu entorno.

Contemplar el cielo. Mientras caminas, mira hacia arriba y observa las nubes, el sol, la luna y las estrellas, dejando volar tu imaginación y disfrutando el firmamento.

Leer un audiolibro. Si te gusta la lectura, escucha un audiolibro mientras caminas para sumergirte en una historia fascinante. También, como hemos recomendado, lee cualquier documento que te apasione.

Practicar la gratitud. Agradece las cosas positivas de tu vida mientras caminas, reconociendo y disfrutando todas las cosas buenas que te rodean.

Bailar. Si te sientes animado, pon tus canciones favoritas y disfruta de un baile improvisado mientras caminas.

Sentir la libertad. Mientras caminas, podrás sentirte libre al realizarlo en algún sendero del bosque o a través del campo abierto.

Contemplar y examinar un cuadro de pintura. Si te agrada el arte plástico, acude a un museo y contempla las pinturas que te agraden caminando por todos los salones del museo.

Apoyarse en imágenes holográficas. Participar en alguna actividad apoyada en imágenes holográficas puede resultar muy gratificante, aunque no sean fáciles de crear.

Actividades Heterotélicas:

Caminar para llegar a un destino específico. Define un lugar concreto al que quieras llegar caminando, disfrutando un parque o la conversación de un amigo en su casa.

Hacer ejercicio. Establece una meta para tu caminata, como quemar cierta cantidad de calorías o recorrer una distancia específica.

Visitar un lugar turístico. Planea una ruta que incluya 2 o 3 puntos turísticos cercanos y aprovecha la caminata para conocer tu ciudad o algún lugar de interés.

Realizar compras. Camina hacia el mercado o centro comercial para comprar alimentos, ropa u otros artículos que necesites.

Acudir a tu lugar de trabajo. Camina hacia tu oficina, siempre que esté cercana. O bien, utiliza un vehículo hasta cierto punto y de ahí camina.

Acudir a tu escuela. Camina hasta tu escuela si se encuentra cerca.

Hacer una actividad deportiva. Si además de caminar, te gusta algún deporte, como el patinaje camina hacia un lugar adecuado para practicarlo.

Caminar para reunirse con alguien. Organiza un encuentro con un amigo o familiar y camina hasta el lugar de reunión.

Participar en una caminata benéfica. Únete a eventos solidarios que involucren caminar por una causa benéfica.

Pasear a tu mascota. Si tienes una mascota, aprovecha la caminata para sacarla a pasear y ambos disfrutarán de ello juntos.

Caminar para tomar fotografías. Define previamente un tema fotográfico y camina en busca de escenas relacionadas para capturar con tu cámara.

Realizar una investigación de campo. Define un tema de investigación y camina por tu entorno para recopilar datos y observaciones relacionadas con el tema.

Debemos tener presente que estas actividades, tanto las autotélicas como las heterotélicas tienen sus propias ventajas y pueden complementarse para brindarte una experiencia de caminata más enriquecedora y satisfactoria. Veamos cuáles son las diferencias fundamentales en estas dos sensaciones humanas.

Respecto a la última actividad autotélica “Contemplar y examinar un cuadro de pintura”, podemos imaginar ciertos aspectos, en relación al SENTIR y DISFRUTAR:

Disfrutar: Al contemplar un cuadro pintado por Van Gogh, es muy probable que se experimente un sentimiento de disfrute. Las vibrantes pinceladas y el juego de colores pueden generar una sensación de asombro y admiración. La manera en que Van Gogh captura la luz y el movimiento en el lienzo puede proporcionar una experiencia visual fascinante y emotiva. El disfrute surge de la apreciación de la creatividad del artista, la expresión de la belleza y el carácter único de la obra. Este sentimiento positivo puede llenarnos de calma, inspiración y placer al contemplar una obra de arte.

Sentir: Al mirar un cuadro de Van Gogh, también se experimenta una amplia gama de sensaciones y emociones. Por ejemplo, una persona se podría sentir maravillada por la intensidad de los colores y la composición caótica que refleja su estado emocional. Al mismo tiempo, podría captar la melancolía y la soledad que a menudo se asocian con su estilo artístico. Además, podría sentir una conexión emocional con la obra si ha leído sobre la vida y las luchas personales de Van Gogh. Así, esta experiencia puede englobar tanto emociones positivas como una apreciación artística, y así mismo sensaciones más complejas, como la empatía por la lucha interna del artista.

Ver un cuadro pintado por Van Gogh puede brindar tanto el “disfrute” de la belleza visual como la oportunidad de “sentir” una amplia gama de emociones y sensaciones al apreciar su arte y la profundidad de sus expresiones emocionales.

De modo más específico, se puede uno imaginar que se está observando cualquiera de las casas pintadas por Van Gogh y así poder describir cómo sería nuestro “SENTIR” y nuestro “DISFRUTAR” al contemplarla.

Sobre el SENTIR es seguro que se experimente una mezcla de sentimientos y emociones. Por un lado, se podría sentir una conexión con la soledad y la nostalgia que a menudo caracterizan sus obras. La manera en que Van Gogh utiliza colores y formas puede evocar una sensación de melancolía y reflexión. La intensidad de los colores y las pinceladas podría transmitir una sensación de pasión y energía emocional. Asimismo, se podría “sentir” empatía hacia el artista y su visión personal del mundo, que a menudo refleja su propia lucha interna.

Sobre el DISFRUTAR se podría imaginar que a pesar de las emociones complejas que se conseguirían experimentar al observar la casa pintada por Van Gogh, también es posible que encuentre elementos para disfrutar en la obra. La forma en que Van Gogh juega con los colores y las texturas podría brindar un placer estético. Quizás lograría apreciar la singularidad y la creatividad con la que interpreta la realidad a través de su estilo expresionista. La intensidad y el contraste de los colores podrían generar una experiencia visual impactante y enriquecedora. Por lo tanto, el “disfrute” podría derivar de la apreciación de la habilidad técnica y la originalidad del artista en la representación de la casa.

En conjunto, la observación de una casa pintada por Van Gogh puede provocar “sentir” emociones y sentimientos complejos y diversos, mientras que también permite “disfrutar” de la belleza única y la expresión artística que caracterizan su trabajo.

Adicionalmente, podríamos imaginar caminando dentro de esa casa pintada por Van Gogh que se construyó de alguna manera, y así describir nuestro Sentir y nuestro Disfrutar (Post futuro CAMINANDO DENTRO DE UNA CASA RECREADA. RECORDANDO A VAN GOGH).

SENTIR: Al encontrarnos caminando dentro de una casa construida siguiendo la inspiración de una pintura de Van Gogh, es posible que se experimente una sensación única y emocional. La influencia de la obra de arte en la arquitectura podría transmitir una conexión profunda con la visión y el estilo del artista. Al igual que en su obra, es probable que estando caminando en los espacios interiores de la casa, los colores y las formas evocaran emociones y sensaciones intensas. Nos podríamos sentir inmersos en una atmósfera rica en matices emocionales, desde la euforia hasta la introspección. La casa podría convertirse en un espacio, que al trasladarnos caminando nos invite a la reflexión y a la contemplación, similar a la experiencia que sus pinturas suelen proporcionar.

DISFRUTAR: El habitar en una casa inspirada en la pintura de Van Gogh nos podría brindar un disfrute constante de la creatividad y la expresión artística en la vida cotidiana. Es decir, observarnos caminando dentro de la casa, seguramente, la forma en que los colores y las formas se integran en la arquitectura podría generarnos un placer estético continuo. La vivacidad de los colores y la interpretación única de la realidad podrían crear un ambiente estimulante y enriquecedor todos los días. La casa podría convertirse en un espacio visualmente impactante y estimulante, donde cada rincón y detalle contribuyen a una experiencia estética única, mientras nos desplazamos caminando. Además, el hecho de estar rodeados de elementos que evocan el estilo de Van Gogh podría inspirarnos un sentimiento de conexión con la historia del arte y la creatividad humana.

En conjunto, habitar y caminar en una casa inspirada en una pintura de Van Gogh podría ser una experiencia emocionalmente rica y estéticamente placentera, permitiendo tanto el “SENTIR” de una conexión con la obra de arte como el “DISFRUTAR” de la belleza y la originalidad en la vida diaria.

Ahora bien, respecto a la actividad autotélica de sentir y disfrutar la casa de Van Gogh no necesitamos construir una interpretación o recreación –mediante la Inteligencia Artificial- de una de sus pinturas, sino que también podríamos caminar dentro de ella mediante una forma virtual apoyándonos en la Holografía (actividad última: “Apoyarse en imágenes holográficas”). (1)

(1) Loya Pinera, Rodrigo & Loya Lopategui, Carlos, Visitando el interior de las obras de los grandes pintores, EMULISA, México, 2023. Distribuido por Amazon, disponible en Kindle Edition.

Sintamos y disfrutemos de las caminatas mientras las realizamos mediante cualquier proceso seleccionado.

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