EL CAMINAR Y EL ETERNO RETORNO

“Caminar, un eterno retorno a nuestros orígenes y un constante avance hacia nuestro destino.”

El caminar se relaciona estrechamente con el arquetipo del Eterno Retorno (1) de diversas maneras, ya sea como un ciclo repetitivo, una conexión con el pasado o un símbolo de renovación y cambio.

Esta práctica ancestral y natural del ser humano nos puede proporcionar también una perspectiva metafórica sobre la naturaleza cíclica de la vida y la importancia de seguir adelante, a pesar de las repeticiones aparentes en nuestra existencia (Posts EL CAMINAR COMO PRÁCTICA FÍSICA Y COMO ALEGORÍA; CAMINAR, UNA METÁFORA EXISTENCIAL. PARTE 1 DE 4).

El arquetipo del Eterno Retorno, sugiere la repetición cíclica de eventos en la historia o en la vida personal, y puede relacionarse indefectiblemente con el acto de caminar de varios modos, como lo explico detalladamente en seguida.

Uno de los aspectos más evidentes es la idea de que, a través del caminar, repetimos un ciclo similar cada vez que damos un paso. Cada paso adelante nos lleva a un nuevo punto en el camino, pero también nos acerca al punto de partida en un ciclo continuo. Esto puede simbolizar la idea de que, aunque avanzamos en nuestras vidas, también volvemos al mismo lugar físico o emocional de donde comenzamos, creando así una sensación de repetición y continuidad.

Otra forma de observar esa analogía, es que el caminar puede verse como un acto que nos conecta con el pasado y con las generaciones anteriores. Muchas rutas y senderos han sido utilizados durante siglos, y al caminar en ellos, estamos siguiendo los mismos pasos que aquellos que los caminaron antes que nosotros. Esto puede evocar la idea de que estamos repitiendo los pasos de nuestros antepasados, manteniendo viva una tradición ancestral.

Un tercer aspecto, es que el acto de caminar también puede representar la idea de renovación y rejuvenecimiento. Cada vez que damos un paso, estamos creando un nuevo momento en nuestra vida, dejando atrás el pasado y avanzando hacia un futuro desconocido. Esta idea de renovación constante puede asociarse con la noción de que, aunque la vida puede parecer repetitiva, siempre hay espacio para el cambio y la transformación.

Veamos someramente su relación con lo arquetípico y lo espiritual.

Carl Gustav Jung, el psicólogo suizo y fundador de la psicología analítica, sin duda encontraría interesante la relación entre el arquetipo del Eterno Retorno y el acto de caminar. Para Jung, los arquetipos son patrones universales e innatos que forman parte del inconsciente colectivo de la humanidad y que influyen en nuestro comportamiento y experiencias.

“En cada paso, el caminante revive el pasado y se proyecta hacia un futuro infinito, en un eterno retorno.”

En el contexto del Eterno Retorno y el caminar, Jung podría interpretar esta conexión como una manifestación del arquetipo del viaje o la búsqueda. El caminar, en este sentido, representaría el viaje de autodescubrimiento y transformación que cada individuo emprende a lo largo de su vida, volteando hacia el pasado y mirando hacia el futuro.

Cada paso dado en el camino simbolizaría un avance en este viaje interior, donde el individuo se enfrenta a sus miedos, descubre nuevas perspectivas y se renueva constantemente.

Además, Jung podría ver en el acto de caminar una expresión de la dualidad de la naturaleza humana, donde cada paso adelante también implica un retorno a nuestras raíces y a lo básico. Esto reflejaría la idea junguiana de la integración de los opuestos, donde el individuo busca equilibrar las diferentes facetas de su ser para alcanzar la totalidad.

Jung probablemente consideraría la relación entre el Eterno Retorno y el caminar como una expresión simbólica profunda de la condición humana, donde el individuo se embarca en un viaje constante de autodescubrimiento y crecimiento, enfrentándose a la repetición y la continuidad de la vida mientras busca alcanzar la totalidad y la integración de su ser.

Mircea Eliade, el destacado historiador de las religiones y filósofo rumano, tendría una perspectiva espiritual interesante sobre la relación entre el Eterno Retorno y el caminar. Para Eliade, el Eterno Retorno es un concepto fundamental en muchas tradiciones religiosas y mitológicas, que representa la idea de que los eventos cósmicos, históricos y personales se repiten cíclicamente.

En el contexto del caminar, Eliade podría interpretar esta práctica como un acto ritualístico que nos conecta con lo sagrado y lo trascendental. El caminar, en muchas tradiciones religiosas y mitológicas, es un elemento importante en rituales y peregrinaciones (2) (Post EL PEREGRINAR, UNA PRÁCTICA ANTIGUA DE CAMINAR), donde se busca alcanzar un estado de conciencia superior o comunicarse con lo divino. En este sentido, cada paso dado en el camino podría verse como una forma de participar en el Eterno Retorno, donde el individuo se une al ciclo cósmico de la “creación-la destrucción-y un reinicio”. Un reinicio que debemos tomar muy en cuenta para el futuro inmediato (3) “Caminar: Futuro de la Humanidad”.

Además, Eliade podría destacar el aspecto iniciático del caminar, donde el individuo atraviesa un proceso de transformación y renacimiento al recorrer un camino sagrado. Cada paso dado en el camino podría simbolizar un paso hacia una nueva comprensión de sí mismo y del mundo que lo rodea, en línea con la idea de que el Eterno Retorno implica no solo la repetición de eventos, sino también la posibilidad de renovación y cambio.

“El caminar, un ritual de renovación donde el Eterno Retorno se manifiesta en cada sendero recorrido.”

Esta perspectiva resalta la importancia del caminar como una práctica que trasciende lo físico y se convierte en una experiencia espiritual y existencial profunda.

Los invito a caminar sosteniendo a ese ser arquetípico-ritualista con nuestras dos manos, una, su parte ancestral y por la otra, su parte espiritual-creativa-artística. Respondamos apropiadamente a Prometeo cuando rompió sus cadenas y le reveló al ser humano de aquellos ancestrales tiempos que su misión insoslayable que debería realizar eternamente, era: “Caminar sobre el Planeta Tierra” (Posts CAMINANDO CON PROMETEO DESENCADENADO; EL CASTIGO DE PROMETEO Y SU ASCENDENTE PSICOLÓGICO. ASPECTOS NEUROCOGNITIVOS).

(1) El arquetipo del Eterno Retorno, profundamente arraigado en el inconsciente colectivo, refleja la idea de que los eventos y situaciones en la historia siguen un ciclo repetitivo. Este arquetipo propone que ciertos acontecimientos, patrones y experiencias se repiten tanto en la vida individual como en la colectiva, y que estos ciclos pueden ser inevitables o escapar al control humano. Se trata de una proyección psíquica que alude a la repetición periódica de determinados hechos y circunstancias en la existencia humana. Así, este arquetipo sugiere que ciertos aspectos de la experiencia humana tienden a manifestarse una y otra vez, sin importar las particularidades de cada situación.

(2) Loya Lopategui, Calos, El Camino de los Milagros, EMULISA, México, 2024. Disponible en Amazon, Edición Kindle: https://www.amazon.es/dp/B0DH2V4VCF

(3) Loya Lopátegui, Carlos, Caminar: Futuro de la Humanidad, EMULISA, México, 2024. Disponible en Amazon, Edición Kindle: https://www.amazon.es/dp/B0DNGLS67N

LOS SENDEROS DEL TAI CHÍ.

La concepción de este post tiene su inicio en el año 2008 cuando estaba decidiendo escribir un manual sobre el caminar. En este libro (MANUAL PARA CAMINAR, LEYENDO, ESCRIBIENDO Y DIBUJANDO) expresaba: “Fue en esta ocasión cuando, después de haber caminado alrededor de 1 Km, hice una relación entre la técnica de meditación trascendental, el Tai Chí, el Yoga y mis ejercicios de caminata, pues al caminar invariablemente llevo conmigo un libro, el cual voy leyendo a medida que camino; y también llevo conmigo algunas hojas pequeñas (hojas tamaño oficio 28×33 cm., cortadas en ¼)  que mientras realizo este ejercicio diariamente, puedo avanzar en mis lecturas y mis escritos”.

La meditación es muy parecida o casi equivalente a la concentración que efectúo en mis caminatas (Post EL CAMINAR, LA MEDITACIÓN Y LAS ONDAS CEREBRALES; Post MEDITACIÓN DINÁMICA O ACTIVA), ya sea a través de la lectura o bien en la escritura de algún tema que estoy desarrollando. Por otro lado, el Tai Chí es similar en cuanto a los principios del sistema WALK-RWD (Post LOS PRINCIPIOS FUNDAMENTALES DEL SISTEMA WALK-RWD) y equivalente a los propios ejercicios de caminata que realizo. Desde luego -me dije-, habrá que revisar qué es esa filosofía del Tai Chí y profundizar en la meditación trascendental para conocer mejor estas técnicas y poderlos relacionar satisfactoriamente con el nuevo sistema que estaba creando; así que cuando decidí escribir el Manual, empecé a documentarme mejor sobre estos sistemas para conocer sus aspectos sobresalientes, mismos que organicé de manera independiente, para un mejor aprovechamiento y análisis. Este mismo modelo funcional utilicé para investigar el sistema Yoga (Posts futuros EL CAMINAR EN EL YOGAKARA; Post EL SISTEMA WALK-RWD Y EL YOGA KUNDALINI).

He mencionado durante los últimos 5 años, a través de este Blog, que el desequilibrio estable genera estimulaciones a diversos órganos, sistemas y glándulas del cuerpo, y fundamentalmente al cerebro (Post EL SISTEMA WALK-RWD ESTIMULA EL PENSAMIENTO CREATIVO, PARTE I). La parte más evidente de ese desequilibrio estable se puede observar en que el propio organismo genera una centena de substancias que son esenciales para su correcto funcionamiento (Post EL SISTEMA WALK-RWD Y LA AUTO-PRODUCCIÓN DE SUBSTANCIAS ORGÁNICAS), aparte de que existen las pruebas suficientes de que impulsa la creatividad y otros beneficios específicos (buena digestión, mejor respiración y circulación, mejora la memoria, y un largo etcétera). El eje funcional y esencial del sistema WALK-RWD es el proceso que se logra mediante el leer, escribir y dibujar, mientras se camina, al colocar al cuerpo en un permanente desequilibrio estable.

Ese desequilibrio estable se observa también, tanto en el sistema Yoga como en el sistema Tai Chí, aunque considero que en este último el desarrollo funcional es más profundo que el Yoga, y por lo mismo estimula al cuerpo físico y a la mente de una manera más eficiente. Este incremento en su poder -y la eficiencia- se logra porque en el Tai Chí el número de las posturas en desequilibrio estable se realizan en el 100% de ellas, mientras que en el Yoga únicamente el 75%; además, en el Tai Chí, el tránsito y traslación de una postura a otra se desarrolla mediante encadenamientos dinámicos, es decir, a través de evoluciones en movimiento, en una continua fluidez, y es lo que le da mayor eficiencia.

Al igual que se desarrolla el sistema WALK-RWD de una manera apacible, tal cual caminamos de modo natural, el Tai Chí se realiza respetando su principio esencial que es la tranquilidad. Todas sus secuencias se realizan también de modo relajado y suelto. Tanto el WALK-RWD como el TAI CHÍ, se desarrollan en movimiento y de manera fluida.

Lo natural, la suavidad y la flexibilidad son características de ambos sistemas, que les permiten a sus practicantes lograr la meditación y la introspección personal. Así mismo, se puede lograr la concentración tanto física como mental. (Post futuro CAMINAR O CORRER, HE AHÍ UN DILEMA).

La práctica de ambos sistemas se logra mediante la cultivación de la respiración, relajación física y mental, sin la obligación de realizar ejercicios con grandes esfuerzos, ni de altas velocidades, ni aceleramientos, y menos de esfuerzos que obliguen a la rigidez de la musculatura, piernas, brazos, o algunos otros miembros del cuerpo.

Cada secuencia (o Forma) del Tai Chí está compuesta de un número de pasos o figuras (posturas), que se desarrollan de modo continuo y fluido, es decir, con desplazamientos y traslaciones constantes. El practicante de Tai Chí avanza entre una figura (postura) y otra mediante ciertos movimientos que le colocan en la siguiente; y así, permanente y sucesivamente hasta terminar la secuencia.

La fuerza del Tai Chí, tanto la física como la dirigida hacia la mente, está localizada en estas dos grandes vertientes de las leyes del movimiento: en las figuras (posiciones del cuerpo en desequilibrio estable) y en el tránsito de una a otra de esas posturas.

Analicemos de modo genérico las “posturas” del Tai Chí a fin de corroborar lo anteriormente mencionado.

Decíamos que esas posturas están sustentadas en un desequilibrio estable, donde el cuerpo y la mente buscan mantenerse en equilibrio, y ello es lo que .estimula tanto al cuerpo físico como al cerebro.

Analizar la inestabilidad de las “posturas” y las “figuras” del Tai Chí resulta fácil, hasta cierto punto; no así para los desarrollos en movimiento del tránsito de una posición a la siguiente, aunque estas estén predefinidas, y se realicen de manera lenta y calmada. No obstante, el propio movimiento entre las distintas figuras, conlleva una inestabilidad del cuerpo físico, que no es necesario demostrarla. El sustento axiomático o evidente de la cinemática, es: un cuerpo se encuentra en desequilibrio cuando está en movimiento por sí mismo o por causa de otro cuerpo.

El cuerpo en su conjunto se analiza durante todo la traslación que sufre de una figura a otra, y en todo ese tránsito sobresalen los movimientos que las extremidades realizan, los brazos-pies y las piernas-manos, que es uno de los aspectos fundamentales que generan un incremento en la estimulación del cuerpo y de la mente. “Ejecución –movimiento- de las secuencias de una forma (figura, postura) a otra”.

Nótese que las secuencias del Tai Chí son procesos rítmicos en cadencia y con compás. Mucho de ello he analizado en el ejercicio del caminar, pues también contiene estos elementos o componentes (factores) de la “musicalización” (Posts RITMO, COMPÁS Y CADECIA EN NUESTRO CAMINAR; NOS CURA EL SONIDO SILENCIOSO DE NUESTRAS HUELLAS; Posts futuros DISFRUTANDO NUESTRO CAMINAR MUSICAL PERCUSIVO; LA PERSONALIDAD DEFINIDA POR EL RITMO AL CAMINAR).

En una y otra actividad -WALK-RWD y TAI CHÍ- podemos observar esa combinación (ritmo) de tiempos entre un movimiento físico y otro, de tal manera que observamos una armonía. Tanto en el caminar como en el Tai Chí se observan pausas y acentuaciones en los movimientos, lo que armónicamente resulta en una cadencia sucesiva.  La velocidad y la aceleración también son factores que encontramos en ambos sistemas, lo que nos muestran la estructuración constante de un compás, tanto en los diversos movimientos de la caminata como en las figuras del Tai Chí, en una misma secuencia.

Otro de los elementos comunes entre estos 2 sistemas, es el principio de verticalidad que se recomienda atender en ambos (Principio No. 4 o Principio de Verticalidad del Sistema WALK-RWD).

Podría todavía decir que el ritmo cadencioso del Tai Chí podría ser una analogía con la poesía. Con esto no pretendo idealizar artísticamente al Tai Chí, sino que podemos homologar una secuencia con un poema, un símil entre ambas creaciones –una filosófica-motriz y la otra artística- porque sin duda esa cadencia del Tai Chí lleva intrínsecamente elementos espirituales –al igual que la poesía- y así lo podemos revalorar en cuanto a la estimulación que genera en la mente, que es lo que pretendo hacer relevante.

He practicado el Tai chí muy levemente en dos épocas de mi vida: en 1983 –durante 6 semanas, una vez cada semana- y en 2023 –durante 8 semanas, una vez cada semana- y únicamente en las salas de enseñanza-aprendizaje, pero nunca en mi casa u otro lugar; con lo que quiero enfatizar es que no soy experto en este sistema.

Sin embargo, fue suficiente para darme cuenta de las bondades que tiene al desarrollar sus fases de: MOVIMIENTO + VERTICALIDAD + CONCENTRACIÓN + RELAJACIÓN + RESPIRACIÓN.

  • MOVIMIENTO
  • VERTICALIDAD
  • CONCENTRACIÓN
  • RELAJACIÓN
  • RESPIRACIÓN.

Todo Movimiento que realicemos deberemos hacerlo con Balance (Equilibrio) y con Coordinación de todas las partes y miembros del cuerpo. El Taichí está diseñado para guardar ese equilibrio y esa coordinación. En otras palabras, las formas y poses que tomemos al estar en movimiento –inclusive en estado de reposo- deben ser acorde con el movimiento natural del cuerpo físico.

El Tai Chí es una disciplina holística, y se le ha denominado “Arte de la Relajación y de la Meditación en Movimiento”: ARMM. En general, no tiene poses antinaturales como el Yoga, como es poner la cabeza boca abajo.

Durante la práctica constante del Tai Chí usted se puede desarrollar y manifestar de modo efectivo. Los beneficios que se logran los he organizado en 3 categorías, a saber:

Beneficios Físicos:

  • Mejora de la Flexibilidad: Los movimientos lentos y fluidos del Tai Chí ayudan a incrementar la flexibilidad de las articulaciones y los músculos, lo que contribuye a mantener una mayor amplitud de movimiento.
  • Fortalecimiento Muscular: Aunque los movimientos son suaves, el Tai Chí involucra a varios grupos musculares, lo que gradualmente ayuda a fortalecer el cuerpo en general.
  • Equilibrio y Coordinación: La práctica constante del Tai Chí mejora la coordinación y el equilibrio, reduciendo el riesgo de caídas, especialmente en personas mayores.
  • Mejora de la Postura: Los principios de alineación en el Tai Chí promueven una postura más adecuada, lo que puede ayudar a aliviar dolores de espalda y prevenir problemas posturales.
  • Relajación Muscular: Los movimientos lentos y el enfoque en la respiración profunda promueven la relajación muscular y reducen la tensión acumulada.
  • Mejora Cardiovascular: Aunque el Tai Chí es de baja intensidad, su práctica regular puede mejorar la circulación sanguínea y la salud cardiovascular en general.

Beneficios Mentales:

  • Reducción del Estrés: La combinación de movimientos suaves y respiración profunda ayuda a reducir los niveles de estrés y promueve una sensación de calma.
  • Mejora del Enfoque: La atención plena requerida durante la práctica del Tai Chí mejora la concentración y la capacidad de enfoque en otras áreas de la vida.
  • Promoción de la Relajación Mental: Los movimientos fluidos y la concentración en la respiración ayudan a relajar la mente, reduciendo la ansiedad y la agitación mental.
  • Aumento de la Conciencia Corporal: El Tai Chí fomenta la conexión mente-cuerpo, lo que aumenta la conciencia de las sensaciones y movimientos del cuerpo.
  • Estimulación Cognitiva: La práctica regular del Tai Chí puede tener un impacto positivo en la función cognitiva, como la memoria y la capacidad de resolución de problemas.

Otros Beneficios:

  • Promoción de la Longevidad: Dado que el Tai Chí es una actividad de bajo impacto que beneficia tanto al cuerpo como a la mente, puede contribuir a una vida más larga y saludable.
  • Conexión Anímica: Para algunos practicantes, el Tai Chí puede tener un componente anímico, es decir, fomenta la conexión con uno mismo y el universo.
  • Fomento de la Socialización: Las clases de Tai Chí brindan oportunidades para interactuar con otros practicantes, lo que puede contribuir a una mayor socialización y sentido de comunidad.

Como algo excepcional, y por ello lo he dejado para esta última parte, el Tai Chí favorece la Meditación, de varias maneras, ya que comparte principios y prácticas que se alinean con los objetivos meditativos:

  1. Atención Plena (Mindfulness): Al igual que en la meditación, el Tai Chí enfatiza la atención plena en el momento presente. Durante la práctica, te concentras en los movimientos, la respiración y las sensaciones corporales, lo que fomenta una atención plena similar a la meditación.
  2. Respiración Consciente: Tanto en el Tai Chí como en la meditación, la respiración consciente es fundamental. En ambas prácticas, la respiración profunda y rítmica calma la mente y ayuda a entrar en un estado de relajación y enfoque.
  3. Conexión Mente-Cuerpo: Tanto en la meditación como en el Tai Chí, se busca una mayor conexión entre la mente y el cuerpo. En el Tai Chí, los movimientos se realizan de manera consciente y fluida, lo que promueve una sincronización entre los pensamientos y las acciones, similar al enfoque en la mente y las sensaciones durante la meditación.
  4. Reducción de la Agitación Mental: La práctica constante del Tai Chí puede ayudar a calmar la agitación mental al requerir un enfoque constante en los movimientos y la respiración. Esto puede llevar a un estado mental más tranquilo, similar al que se busca en la meditación.
  5. Relajación Profunda: Tanto el Tai Chí como la meditación buscan inducir un estado de relajación profunda. Los movimientos suaves y fluidos del Tai Chí combinados con la respiración profunda tienen un efecto relajante en el sistema nervioso, lo que es beneficioso para la meditación.
  6. Estímulo de la Conciencia Sensorial: Durante la práctica del Tai Chí, se presta atención a las sensaciones corporales, la postura y el equilibrio. Esto fomenta la conciencia sensorial similar a la meditación, donde se presta atención a las sensaciones físicas y mentales.

El Tai Chí, al igual que nuestro sistema WALK-RWD, es una forma activa de meditación en movimiento. Desde luego que no es la meditación tradicional que nos transmiten de que debemos estar en silencio y en estado de reposo, sino que comparte elementos de concentración, abstracción, relajación con el movimiento y con el pensamiento, lo que resulta en una forma efectiva de lograr los mismos beneficios para la mente y el cuerpo.

LOS CAMINOS BLANCOS Y LA RUEDA EN LOS MAYAS-PARTE II

Los antiguos mayas construyeron una vasta y sofisticada red de caminos blancos (Post LOS ANTIGUOS MAYAS Y SUS CAMINOS BLANCOS. PARTE I), conocidos como sacbeob, que conectaban sus ciudades, centros ceremoniales, y plazas. Estos caminos, recubiertos con una capa de estuco blanco, no solo servían como rutas físicas, sino que también poseían un profundo significado espiritual. Eran reflejos terrenales del movimiento de los astros en el firmamento, una representación tangible de la conexión entre el cielo y la tierra. Los mayas, expertos astrónomos, trazaron estos caminos en alineación con trayectorias celestiales, otorgándoles un valor sagrado que iba más allá de su utilidad práctica.

Sin embargo, en medio de esta compleja red de caminos blancos, surge una pregunta intrigante: ¿por qué los mayas, que conocían el principio de la rueda, nunca la utilizaron en sus actividades cotidianas de transporte a lo largo de estos caminos? La respuesta, como hemos explorado, está profundamente enraizada en sus creencias religiosas y cosmológicas (1).

Para los mayas, el círculo y la rueda simbolizaban el Sol, la fuente de vida y energía que regía su universo. El Sol, representado como una figura circular, era un elemento central en su cosmovisión, siendo venerado como el dios principal, Itzamná, o como Kinich Ahau, el dios del Sol en su aspecto más directo. Utilizar la rueda en los caminos blancos habría sido, en cierto modo, una profanación del símbolo divino, ya que esto implicaría llevar al Sol, o su representación, en contacto directo con la tierra, donde habitaban los muertos y las fuerzas del inframundo. Este contacto simbólico con la tierra habría apagado su luz divina, reduciendo al Sol a un estado de inactividad o muerte, lo que era inconcebible para los mayas.

Los caminos blancos, por su parte, se concebían como rutas sagradas, no solo para el tránsito de los seres humanos, sino también como reflejos de los caminos de los dioses y los astros en el cielo. Al recorrer estos caminos, los mayas no solo se trasladaban físicamente, sino que también participaban en un ritual cósmico, alineándose con el movimiento de las estrellas y el Sol. La ausencia de la rueda en este contexto subraya la importancia de mantener la pureza de estos caminos, evitando la profanación del símbolo solar.

Es posible imaginar que, para los mayas, caminar por estos sacbeob era una forma de emular el movimiento de los dioses y los astros en el cielo, un acto de devoción que conectaba lo terrenal con lo celestial. La rueda, con su simbolismo solar, no tenía cabida en estos senderos sagrados, pues su uso habría desvirtuado la naturaleza divina del camino y su relación con el cosmos. De esta manera, la decisión de no utilizar la rueda en los caminos blancos no fue una limitación técnica, sino una elección consciente y profundamente religiosa, enraizada en la cosmovisión maya.

Este análisis de la relación entre los caminos blancos y la rueda en la cultura maya revela cómo la tecnología y la religión se entrelazaban en una compleja red de significados, donde cada elección estaba cargada de simbolismo y respeto hacia las fuerzas divinas que regían el universo. Los mayas, al abstenerse de utilizar la rueda, no solo preservaron sus creencias religiosas, sino que también mantuvieron la pureza y el propósito sagrado de sus caminos blancos, como rutas para el tránsito divino y humano, reflejando la ordenada danza de los astros en el firmamento.

Caminar es un acto ancestral que conecta al ser humano con la esencia misma de la vida. En un mundo donde la rueda, símbolo de movilidad y avance tecnológico, ha transformado nuestra forma de desplazarnos, es fácil olvidar la simplicidad y los beneficios de un paseo a pie. La rueda, en su forma moderna de automóvil, nos lleva rápidamente de un lugar a otro, pero a menudo a costa de nuestra salud y bienestar.

Al caminar, dejamos de lado la velocidad impersonal del vehículo y nos sumergimos en el ritmo natural de nuestro cuerpo. Cada paso es un latido que nos conecta con la tierra (Post CAMINANDO CON PROMETEO DESENCADENADO), un respiro que oxigena nuestro ser y un momento de meditación en movimiento. Caminar no solo fortalece nuestro cuerpo, sino que también despeja nuestra mente, ofreciéndonos una pausa en la vorágine diaria.

Así como los antiguos mayas recorrieron sus Caminos Blancos, siguiendo las trayectorias sagradas de los astros, nosotros también podemos encontrar en la caminata un sendero hacia la paz interior y el bienestar. Al optar por caminar, elegimos un camino de salud y serenidad, recordándonos que, a veces, el viaje más valioso es el que hacemos con nuestros propios pies.

Invito a todos a redescubrir la belleza de caminar, a disfrutar de la naturaleza, a conectarse consigo mismos y a recordar que, aunque la rueda nos lleve lejos, es el caminar lo que nos mantiene verdaderamente en contacto con la vida.

(1)Loya Lopátegui, Carlos, La Rueda en los Mayas. Explorando un misterio ancestral, EMULISA, México, 2024. Versión disponible en Amazon, Edición Kindle: https://www.amazon.es/dp/B0DBKD1TSN.

CONTROLANDO Y MIDIENDO EL AZÚCAR MIENTRAS CAMINAMOS

El presente Post tiene 2 propósitos fundamentales: Analizar lo que representa el azúcar para el consumo humano, y señalar los beneficios que tiene Caminar regularmente con el objeto de prevenir enfermedades relacionadas con el azúcar.

Comencemos con el primer propósito.

Características del azúcar: El azúcar es un carbohidrato presente de forma natural en muchos alimentos, pero también se produce de forma industrial a partir de la caña de azúcar o la remolacha. Se presenta en varias formas, siendo la sacarosa (azúcar de mesa), la fructosa (azúcar de las frutas) y la glucosa las más comunes.

Niveles de glucosa: El consumo de azúcar afecta los niveles de glucosa en la sangre, aumentando su concentración de manera rápida. Esto puede tener impactos negativos en la salud, especialmente en personas con diabetes, ya que puede causar picos de glucosa que son difíciles de controlar.

Efectos beneficiosos: El azúcar puede proporcionar energía rápida al cuerpo, lo que es beneficioso en situaciones de alta actividad física. Además, el consumo moderado de azúcar puede estimular la producción de endorfinas, generando una sensación de bienestar y placer.

Efectos malignos: El consumo excesivo de azúcar puede llevar al aumento de peso y a la obesidad, así como a la resistencia a la insulina, un factor de riesgo para la diabetes tipo 2. Además, el consumo elevado de azúcar se ha asociado con un mayor riesgo de enfermedades cardiovasculares, como la hipertensión arterial y enfermedades del corazón.

Consumo recomendado: Las organizaciones de salud, como la Organización Mundial de la Salud (OMS), recomiendan limitar el consumo de azúcares añadidos a menos del 10% de la ingesta calórica diaria total. Sin embargo, en la dieta actual, con la presencia de alimentos procesados y bebidas azucaradas, seguir estas recomendaciones puede ser difícil.

Alternativas al azúcar: Como alternativas al azúcar refinada, se pueden utilizar la miel, el jarabe de arce, los edulcorantes artificiales y otros endulzantes naturales. Estas alternativas pueden ofrecer beneficios como un menor impacto en los niveles de glucosa en sangre, sin embargo, si se consumen en exceso, también se presentan riesgos y efectos negativos.

Impacto en la salud mental: El consumo de azúcar puede afectar la salud mental, ya que algunos estudios sugieren que puede estar relacionado con un mayor riesgo de depresión y ansiedad. El consumo excesivo de azúcar también puede afectar el estado de ánimo y la concentración en algunas personas.

Consejos para reducir el consumo: Para reducir el consumo de azúcar, se pueden seguir algunos consejos prácticos, como leer las etiquetas de los alimentos para identificar el contenido de azúcar, evitar las bebidas azucaradas, optar por alimentos naturales y bajos en azúcar, y reducir el consumo de alimentos procesados.

Efectos del azúcar en el rendimiento físico: El azúcar puede tener efectos tanto positivos como negativos en el rendimiento físico. En pequeñas cantidades, puede proporcionar energía rápida durante el ejercicio, pero en exceso puede causar picos de glucosa en sangre que afectan negativamente la recuperación y el rendimiento a largo plazo.

Consideraciones éticas y sociales: El consumo de azúcar también tiene implicaciones éticas y sociales, especialmente en relación con la industria alimentaria y la publicidad de alimentos dirigida a los niños. El exceso de consumo de azúcar puede contribuir a problemas de salud pública, como la obesidad y la diabetes, lo que plantea preguntas sobre la responsabilidad de las empresas y los gobiernos en la regulación de su consumo.

Ahora, pasemos al 2º propósito.

El caminar todos los días puede ayudar a mitigar algunos de los efectos malignos del azúcar en el cuerpo. Algunos de los beneficios de caminar regularmente incluyen:

  1. Control de peso: El ejercicio regular, como caminar, puede ayudar a controlar el peso corporal. Esto es importante ya que el consumo excesivo de azúcar puede contribuir al aumento de peso, lo que a su vez aumenta el riesgo de enfermedades relacionadas con la obesidad.
  2. Mejora de la sensibilidad a la insulina: El ejercicio regular puede aumentar la sensibilidad a la insulina, lo que ayuda a mantener los niveles de glucosa en sangre estables. Esto es especialmente beneficioso para las personas con resistencia a la insulina o diabetes tipo 2.
  3. Salud cardiovascular: Caminar puede ayudar a mejorar la salud cardiovascular, lo que es importante ya que el consumo excesivo de azúcar puede aumentar el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
  4. Reducción del estrés: El caminar, al igual que con otro tipo de ejercicios, ayuda a reducir el estrés y mejora el estado de ánimo. Esto puede ser beneficioso ya que el consumo excesivo de azúcar se ha relacionado con un mayor riesgo de depresión y ansiedad.
  5. Aumento de la energía: La caminata regular aumenta los niveles de energía y reduce la sensación de fatiga, lo que puede contrarrestar los efectos negativos del azúcar en el cuerpo.

Caminar todos los días puede ser una estrategia efectiva para mitigar los efectos malignos del azúcar, especialmente cuando se combina con una alimentación saludable y equilibrada.

Por último, el caminar puede ser beneficioso en el manejo y prevención de diversas enfermedades, incluyendo la diabetes, hiperlipidemia, enfermedad cardiovascular, hígado graso, algunos tipos de cáncer y caries dental. En estos casos específicos de morbilidad, podemos señalar aspectos importantes, para cada uno de ellos.

  1. Diabetes: El ejercicio regular, como caminar, puede ayudar a controlar los niveles de azúcar en la sangre, mejorar la sensibilidad a la insulina y reducir el riesgo de complicaciones relacionadas con la diabetes.
  2. Hiperlipidemia: El caminar, ejercicio aeróbico, ayuda a reducir los niveles de colesterol LDL (colesterol “malo”) y triglicéridos, y aumenta el colesterol HDL (colesterol “bueno”), lo que puede ayudar a controlar la hiperlipidemia.
  3. Enfermedad cardiovascular: Caminar regularmente fortalece el corazón y mejora la circulación sanguínea, lo que puede reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares, como la hipertensión arterial, enfermedad coronaria y accidente cerebrovascular.
  4. Hígado graso: La caminata ayuda a reducir la acumulación de grasa en el hígado, lo que puede ser beneficioso en el manejo del hígado graso no alcohólico.
  5. Algunos tipos de cáncer: El caminar regularmente ayuda a reducir el riesgo de desarrollar algunos tipos de cáncer, como el cáncer de colon, mama y pulmón.
  6. Caries dental: Caminar puede contribuir a una mejor salud bucal al promover la producción de saliva, que ayuda a neutralizar los ácidos en la boca que pueden causar caries dental.

Como un aspecto sobresaliente, quisiera mencionar que el caminar regularmente puede ayudar también a mejorar o mitigar los efectos malignos del azúcar en enfermedades mentales como el Alzheimer:

7     Alzheimer: El ejercicio regular, como caminar, puede ayudar a reducir el riesgo de desarrollar enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer. El ejercicio puede mejorar la función cognitiva, reducir la inflamación y promover la salud cerebral en general.

  • Otras enfermedades mentales: El caminar regularmente también puede tener efectos positivos en otras enfermedades mentales, como la depresión y la ansiedad. El ejercicio puede ayudar a reducir los síntomas de estas enfermedades y mejorar el estado de ánimo en general.

El caminar regularmente puede ser una estrategia efectiva para mejorar la salud mental y reducir el riesgo de desarrollar enfermedades mentales, incluido el Alzheimer, especialmente en personas que consumen azúcar en exceso.

En general, caminar regularmente puede ser una estrategia efectiva para mejorar la salud en general y reducir el riesgo de desarrollar estas enfermedades. Sin embargo, es importante complementar el ejercicio con una dieta saludable (1), bajando el consumo del azúcar y practicando otros hábitos sanos de vida para obtener los mejores resultados.

Salgamos a caminar para ayudarnos de los efectos del azúcar.

(1)Loya Lopátegui, Carlos, La Dieta de los Sabores. El Arte de Saborear los Alimentos, EMULISA, México, 2024. Versión disponible en Amazon, Edición Kindle: https://www.amazon.es/dp/B0CVMY8WH7

EL CAMINANTE DE LOS TAMBORES

La leyenda del Caminante de los Tambores simboliza la búsqueda interior y la travesía de la vida. Cada uno de nosotros es como el Caminante, eligiendo caminos diferentes en nuestra búsqueda de significado y propósito. Los tambores representan el ritmo constante de la vida, el latido del universo que nos conecta a todos.

Este post está inspirado en mi cuento largo titulado “El Tamborilero de los Caminos Mágicos”; pero también es un consecuente del 5º Principio o Principio de Ritmo, Compás y Cadencia: Todo individuo tiene un ritmo, un compás y una cadencia propios, sólo tiene que descubrirlos, aplicarlos y mantenerlos mientras camina (Post RITMO, COMPÁS Y CADENCIA EN NUESTRO CAMINAR).

En tiempos ancestrales, cuando el mundo aún resonaba con la magia de lo desconocido, existía un ser singular que vagaba por los senderos de todo tipo y por todo el orbe. Este individuo, mantenía siempre una sonrisa y tenía un brillo especial en sus ojos, que transmitía una completa felicidad, e invariablemente llevaba consigo un tambor que se comentaba era un regalo de los dioses. Con sus sonidos percusivos guiaba a las personas por caminos insospechados y maravillosos.

Todos los días, al alba, emergía de entre las sombras de la madrugada con un tambor distinto entre sus manos; un día era el tambor de marco, cuyo sonido alegre y festivo llamaba a la celebración y la unión; otro día era el tambor de trinchera, cuyo ritmo suave y cadencioso inspiraba la introspección y la calma.

La gente que lo escuchaba comprendía este patrón, y gustaban acompañarlo en sus recorridos, esperando con ansias todos los días que pasara para ver qué tambor llevaba consigo para escuchar sus ritmos melodiosos y seductores. Los días en que el tambor de caja resonaba, las calles se llenaban de risas y bailes. Los días del tambor djembe, la gente se sumía en meditaciones silenciosas, buscando respuestas en el eco de sus propios pensamientos.

La leyenda del Caminante de los Tambores ha perdurado a lo largo de las eras, recordándonos que, aunque los caminos que elegimos pueden ser diferentes, todos estamos unidos por el ritmo universal de la existencia. Simboliza la búsqueda interior y la travesía de la vida. Cada uno de nosotros es como el Caminante, eligiendo caminos diferentes en nuestra búsqueda de significado y propósito. Los tambores representan el ritmo constante de la vida, el latido del universo que nos conecta a todos. Aunque nuestros caminos sean distintos, todos estamos unidos por esta experiencia común de existir, marcada por ese ritmo universal que nos impulsa a seguir adelante, a explorar y a descubrir lo que nos aguarda en cada paso del camino.

En sus travesías legendarias, el Tamborilero portaba un solo tambor de los que acostumbraba percutir, según el sendero que seleccionaba caminar y convertiría en un Camino Mágico. Cada tambor tenía un sonido y un propósito únicos. Se escuchaba a cada uno de ellos con mensajes especiales y sugerentes.

Sin saber el Tamborilero cómo, los tambores se seleccionaban (elegían, escogían) ellos mismos para acompañarlo; no obstante, tenía el pleno conocimiento de que el que lo acompañara en cada travesía se identificaba con el tipo de camino mágico por el cual él conduciría a las personas por el sendero que se había elegido.

Los tambores más ilustres que lo acompañaban, en sus cortejos mágicos eran y siguen siendo, los siguientes:

El tamboril, con su ritmo festivo y enérgico, guiaba a las personas por los caminos de la celebración y la alegría, donde las risas resonaban entre los árboles y la danza se convertía en un tributo a la vida.

El tambor de marco, con su cadencia tranquila y contemplativa, conducía a través de los senderos de la introspección, donde cada paso era una oportunidad para reflexionar sobre el camino recorrido y el porvenir. En esos momentos, el silencio se convertía en un compañero sabio, susurrando secretos del alma.

El pandero, con su histrionismo melódico acompañaba a los caminantes por los senderos, creando un cortejo musical, donde se creaba una verdadera sinfonía de ritmos simultáneos.

El tambor de trinchera, diseñado para ser tocado en movimiento, llevaba a los seguidores por caminos de acción y determinación. Con su ritmo constante y enérgico, inspiraba a superar obstáculos y a avanzar con paso firme hacia el destino deseado.

El tambor de caja, con su sonido potente y enérgico, marcaba el paso de los seguidores por los caminos de la fuerza y la resistencia. En esos momentos, el Tamborilero les recordaba que, con determinación y valentía, podían superar cualquier desafío que se interpusiera en su camino.

El djembe, con su profundo y resonante sonido, conducía a través de los caminos de la conexión con la naturaleza y el espíritu. Bajo la sombra de los árboles antiguos y el murmullo de los arroyos cristalinos, el Tamborilero enseñaba la importancia de estar en armonía con el mundo que nos rodea.

Este es un día que acompañará al Tamborilero un Tamboril, y como su propio espíritu lo define, la persona que salga a caminar podrá celebrar con alegría e introducirse tranquilamente en sus pensamientos positivos. ¡Qué esperas para salir a caminar?

(*) Loya Lopategui, Carlos, El Tamborilero de los Caminos Mágicos, EMULISA, México, 2024. Disponible en Amazon, edición Kindle: https://www.amazon.es/dp/B0CZSN8B54.