SALUD

Son muchos los beneficios que se obtienen al caminar, especialmente aquellos que favorecen el mejor rendimiento en todos los sistemas y órganos del cuerpo humano.

SISTEMA DIGESTIVO.

Creemos pertinente recomendar la caminata después de cada comida, a diferencia de la gran mayoría de otros ejercicios, pues nos ayuda en una mejor digestión.

SISTEMA CARDIOVASCULAR O CIRCULATORIO.

En las enfermedades o afecciones de tipo cardiovascular también el programa  funciona de manera preventiva y correctiva. Cualquier individuo -hombre o mujer- que ha tenido la disciplina de caminar diariamente un par de kilómetros durante un largo período, podrá observar -salvo casos excepcionales- que sus mediciones de colesterol son bajas.

También podemos asegurar que aquellos que lo tienen alto, podrán disminuirlo considerablemente con este sistema y desde luego ayudándose con una buena dieta.

Personas que caminan bajo programas especiales, han demostrado que sus sistemas cardiovasculares respectivos están funcionando mejor que los que son sedentarios.

SISTEMA RESPIRATORIO.

Este sistema, junto con el cardiovascular, es el que se encarga de tomar el oxígeno del aire y transportarlo a todas las partes del cuerpo humano.

Un gran porcentaje de la población que vemos ejercitándose, en lugares cubiertos, pero sobre todo al aire libre, es con el propósito de mejorar la función de este sistema, sea porque sienten algún malestar concreto o porque saben por pruebas clínicas que su dolencia es anormal y tratan de mejorar.

El caminar es una de las funciones de nuestro organismo más natural y ordinaria, y que la hemos realizado desde siempre; siendo la forma normal y habitual que tenemos para transportarnos de un lugar a otro y es de esta manera como nuestro organismo realiza mejor la función de la respiración.

SISTEMA OSEO.

El cuerpo humano procesa miles de productos diariamente y produce varias decenas de sustancias; es una fábrica y entre los que genera están los huesos o sea, la masa ósea.

La forma directa para producir la masa ósea es mediante el movimiento: es decir básicamente caminando.

Todo tipo de ejercicio procura un beneficio al organismo humano, que se ve reflejado en el fortalecimiento de los diferentes sistemas, entre ellos el óseo.

La caminata genera beneficios indudables en todo el sistema óseo, pero fundamentalmente en las extremidades inferiores (dedos de los pies, pies, tobillos, piernas, rodillas, muslos, caderas y coxis), en la columna vertebral y espalda.